Somos L'Alacantí

El nuevo periódico de la comarca

COMERCIO DE SAN VICENTE

El Campello LOCAL

LA SOLEDAD – Naufragio 1959

Embarcación del tío Pepe “Tarrara”

El mar, la mar, en la arena tres palmeras y a su sombra nuestro nido. Mar adentro, donde las aguas pierden sus espejos… (Primer verso del poema de R. Climent, “El Mar La Mar” escrito en el año 1995).

Y es ahí a pie de playa, donde las aguas pierden sus espejos y el oleaje su fuerza. Ahí nace o termina el pueblo de El Campello, otrora pescador. Un pueblo que parió  homens de la mar y sufridas mujeres enlutadas.

A pie de playa nació José Poveda Ramos, más conocido por “Pepe tarrara” y con los años “el tío tarrara”. Respiraba aire, yodo y sal, casi temerario en la navegación; ingredientes que modelaban al marinero convirtiéndole con honor, en viejo lobo de mar. Tarrara era considerado como un dios de las singladuras y la técnica de pesca, desde Vilajoisa hasta San Pedro del Pinatar. Cortaba la mar en busca del maná que le prometía las costas de Larache: Alicante, Campello (para cargar lastre) Santa Pola, Malaga, Estrecho de Gibraltar, Cabo Espartel, Tanger- Safi- Larache. El regreso obligado: Ceuta (Septa para los Marroquis), reparar fondos, suministros o hacer aguada. “Los desahogos” que ofrecían algunos cafetines del Barrio del Príncipe serían tema de tertulia en horas de descanso, entre cajetillas de tabaco, medio acabadas,  inhalando y exhalando Celtas o Ideales; tabaco de la época que a nadie mataba. De nuevo cruzar el Estrecho- Málaga- Cartagena y destino Alicante. “La navegación es el arte de la ciencia de conducir una embarcación desde el zarpado hasta la llegada, eficientemente y con responsabilidad”. De todo ello saben mucho nuestros viejos lobos de mar. Hombres que, con sus partes (salarios – según ventas y gastos) armador, patrón, motorista o simple marinero, ayudaron a trazar las calles del pueblo, levantando con esfuerzo sus casas.

Pepe tarrara casó con Antonia Alberola Ramos, mujer valiente y trabajadora que ayudaba en la economía familiar vendiendo marrajo y otros salazones de puerta en puerta. Su mercancía era muy requerida por las villas de la playa y fincas de la huerta. Tarrara desde muy joven se ganaba el pan de la pesca en general, faenando con su embarcación a vela, de nombre Virgen del Socorro. Tras largo tiempo en picadero la madera se resintió y al vararla de nuevo la barca se partió en dos, en el mismo puerto de Alicante, finiquitando su cometido (1956).

A esas fechas Tarrara ya contaba con otra embarcación, rotulada con el nombre LA SOLEDAD, adquirida a módico precio, que dormía tiempo ya en picadero (dique seco). Aunque muy protegida y vigilada se hallaba bastante deteriorada. Era propiedad de José Carratalá Ripoll (alcalde entre los años 1948-54) Carratalá se había hecho construir otra que bautizó con el nombre de MARUJA- SOLEDAD. Para el todavía joven Tarrara, y su esposa Antonia, fue una inversión que, aunque no por la adquisición en sí  de la barca, si por el motor cuyo coste superaba las 70.000 pesetas y cuya potencia era de 75 caballos (motor Jonimontell,motores de fabricación alicantina, (junto a la fábrica de harinas Bufort- carretera general-tramo Santa Pola-Alicante) motores que dieron muchos quebraderos de cabeza a los armadores, con pérdidas y desgracias.

El flamante amo, con la barca comprada visto el motor, solo quedaba contratar un buen calafate de ribera, siendo recomendado, por sus primos Pepe y Toni Palomares “Malamaera”, (Toni al casarse comenzaron a llamarlo “Toni el cañot”, mote de su familia política).  El joven calafate Vicente Climent Casanova (el don vicent) era a su vez primo de los Malamaera. Un maestro con la estopa y demás herramientas, la mayoría fabricadas por él mismo. “El Calafate es la herramienta y el calafateador la persona que realiza tal función”. Vicente y su ayudante Faustino, un carpintero de Sant Joan, repararon y dejaron como nueva la embarcación que, provista de avituallamientos y pertrechos, comprados en Algeciras y Ceuta (un tal Pepe Alberola suministraba a los armadores y ayudaba en la venta de pescado) no tardaría en emprender sus derrotas hacía la pesca en general que le ofrecía las costas Africanas de LARACHE.

Salida:Alicante-campello, con parada en la desembocadura del río seco para cargar lastre. De regreso y a la altura del apeadero de la playa Sant Joan mandaba anclar  con fijación hacía la Santa Faz, ordenando a la tripulación se encomendaran en oración para tener bonanza en las singladuras de ida y vuelta. Llegados a la bocana del Puerto de Santa Pola se acercaban los faluchos santapoleros (unos descargaban el lastre y otros cargaban la sal. ( las escolleras antiguas de Santapola se hicieron con piedras de la desembocadura del río seco de Campello).

El tío Tarrara, un lobo de mar parco en palabras, sin embargo se encomendaba a la Santa Faz y nunca le faltaban los escapularios de fe que su devota esposa recogía directamente de las monjas de clausura del Monasterio de la Santa Faz y repartía a todos los marineros que emprendían viaje. En LA SOLEDAD también se embarcó su hijo José (padre e hijo se turnaban en las mareas). Cumplidos los catorce años (bajo la tutela del padre, su nieto Vicente se dispuso a marinarse. Sumados unos cuantos viajes padre e hijo se desembarcaron, por desacuerdos familiares con el viejo lobo de mar. En este último viaje, al que nos referimos, el tío Tarrara, ya con 65 años de edad, y a la altura de Málaga, se sintió mal y aconsejado por su hijo Juan José, el muet), yerno y cuñado decidió desembarcar y regresar a casa. ¡Suerte! – Les deseó. ¡Nos veremos en Navidad! Le respondieron. La providencia, casualidad, causa-lidad… tenía que pasar y, pasó una más, de las muchas desgracias por naufragio que a este pueblo de mar tantas veces sacudió y enlutó.

En 1959 La SOLEDAD fue engullida por un brutal temporal, con vientos encontrados y mareas contrarias, entre LARACHE Y CABO ESPARTEL, las mismas costas que tantos frutos, el  mar dio a nuestros marineros.

 Tripulación: 14 marineros en total, la mayoría de Málaga (Palos, la malagueta y alrededores (se desconocen los nombres). 4 eran campelleros, tres de ellos hijo, cuñado y yerno de del amo: José Juan poveda alberola (el mut) de 27 años, Cayetano Alberola Ramos de 56 años, Antonio Moll Giner de 32 años (primer mécanico) y Juan Planelles Blanes, de 28 años (catorceno) primer motorista. Los cuerpos sin vida, casi irreconocibles, de José Juan y su tío Cayetano, aparecieron en la costa de Algeciras. Fueron reconocidos por Antonio Palomares Esteve, oriundo del campello… ¡Es el hijo de Tarara es el hijo de Tarrara!!

 Las tripulaciones se enrolaban según las mareas (un año) no siendo fijas. Patrón y demás técnicos solían ser de la familia del amo, así como el cocinero.

Anterior al naufragio, a saber: Tripulación De Villajoiosa, José Palomo Giner (cocinero). Cuatro marineros de Malaga (….). Vicente Palomares “Tarrara”de 13 años de edad( para marinarse- dar agua y tabaco a los marineros). Gaetano, José Juan Poveda. el tío llufres” (patrón de costa). Tarrara hijo (técnico de pesca) . Antonio Moll (motorista). “El tío Copet”                                              

“… estar en un barco es como estar en la cárcel, pero con el riesgo añadido de morir ahogado”. Samuel Jhonson”

2 COMENTARIOS

  1. Hay que cuidar la redacción empleando las mayúsculas cuando toca ( Tio Tarrara , etc ) y los signos de puntuación también .
    Es La Vila Joiosa o Villajoyosa .
    ¿ Cargar lastrte en El Campello ? . Has oido o leido que las barcas ( caeros o similares ) embarcaban «colos » a modo de lastre : entonces las embarcaciones no tenían tanques, inundables ,de lastre .
    Los » Celtas » y los «Ideales » fueron muy posteriores : entonces se tiraba – por los que no utilizaban pipa -del cuarterón d el librillo de papel o «caliqueños »
    Y tengo que mirar en los derroteros y cartas las posiciones que mencionas en tu escrito …
    la idea no es mala ….

  2. Felicidades, Reme. El artículo es excepcional, no tiene desperdicio. Recuperar la historia de un pueblo es lo más sagrado. No hay que perder las señas de identidad. Un abrazo enorme y, que sepas que tienes un seguidor incondicional.

DEJA UNA RESPUESTA

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *