Ya ha pasado un año desde el comienzo de una nueva legislatura en el Ayuntamiento de San Vicente del Raspeig. Durante este año, el grupo municipal de Ciudadanos se ha consolidado con un proyecto renovado y sólido, realizando una labor firme y constante de control al equipo de Gobierno, ejerciendo nuestra responsabilidad como principal partido de la oposición. Así lo quisieron los vecinos y a ellos nos debemos.

Estos primeros doce meses han puesto en evidencia las carencias de un equipo de Gobierno sin liderazgo, sin iniciativas y sin cohesión interna, que ha perdido la oportunidad de resolver algunos de los principales problemas que tienen los vecinos. San Vicente, con los tres contratos de limpieza caducados, es hoy una ciudad más sucia que hace un año, con unas zonas verdes más descuidadas y con un abandono evidente de las partidas rurales y las urbanizaciones.

La suciedad, la maleza acumulada en caminos y parcelas, la falta de alumbrado en las calles o el mal estado de los jardines y zonas verdes de San Vicente no es algo inevitable o ante lo que debamos resignarnos. En Ciudadanos no nos cansaremos de trasladar las quejas de los vecinos, de proponer soluciones al equipo de Gobierno y de recordarles todos los días que ser concejal significa, por encima de todo, solucionar los problemas de la gente.

Ciudadanos es un partido útil. Lo es donde gobierna y también lo es donde ejerce como oposición. En San Vicente llevamos un año demostrándolo, haciendo propuestas serias y rigurosas que son positivas para los vecinos. Bajar la tasa de residuos, instalar pasos de peatones 3-D, contenedores de basura accesibles para personas mayores y con discapacidad, paneles informativos con la programación cultural…son solo algunos ejemplos.

Porque además de evidenciar su incapacidad para resolver los problemas, como es nuestra obligación, también aportamos soluciones y sabemos llegar a acuerdos con el resto de grupos. Así lo hemos demostrado durante la pandemia del Covid-19, tendiendo la mano al equipo de Gobierno para sacar adelante medidas concretas para hacer frente a las consecuencias que la crisis sanitaria está ocasionando a autónomos, comerciantes, hosteleros, empresarios y vecinos en general.

Tenemos por delante tres años en los que los cinco concejales de Ciudadanos vamos a seguir siendo la voz de los vecinos de San Vicente, trasladando sus problemas y necesidades a un equipo de Gobierno que a día de hoy camina sin rumbo, sin un proyecto de ciudad y que se limita a ir apagando los fuegos de una gestión claramente ineficaz que los vecinos están sufriendo en primera persona. Las largas colas a las puertas del Ayuntamiento para ser atendidos por la falta de previsión del equipo de Gobierno es una muestra más de ello.