Una pareja de San Vicente ha vivido una situación surrealista y quieren hacerla pública. Hace unos meses, emprendieron la compra de una vivienda en la localidad a través de una inmobiliaria. Una vez se decidieron, comenzaron a realizar todos los trámites necesarios, incluyendo la solicitud de una hipoteca, seguros relacionados, compra de mobiliario, etc…

Además, rescindieron su contrato de alquiler anterior, con vistas a que la entrega de llaves de la nueva vivienda, situada en la Calle Esperanza, estaba programada para los siguientes cinco días. Habían firmado un contrato de arras, teniendo que adelantar una determinada cantidad, cuando para su sorpresa se encontraron con una notificación que no podrían creer.

La empresa con la que realizaron la gestión le informó a escasos días de la mudanza que el Ayuntamiento de San Vicente había ejercido el derecho de tanteo de la propiedad para incorporarla al futuro parque de Viviendas Sociales. Según indican los afectados, se trata de un piso valorado en 115 mil euros con tres habitaciones, garaje y trastero, el cual no podrán comprar finalmente, quedándose en la calle tras una gran inversión realizada.

Los vecinos de San Vicente acudieron al área de urbanismo, donde les confirmaron la versión que también nos han trasladado a nosotros. El problema fue que no se advirtió a los compradores en ningún momento del proceso que la vivienda estaba sujeta a tanteo. Se trata de la primera propiedad adquirida por el consistorio para el parque, aunque desde urbanismo adelantan que habrá más tanteos con una finalidad social.

Los afectados están desesperados y han puesto el caso en manos de sus abogados, pero mientras tanto se encuentran con el alquiler rescindido, los muebles comprados y el proceso de compra otra vez en el punto de partida tras haber perdido tiempo y dinero.