En el pleno ordinario celebrado el miércoles 29 de junio, se aprobó la modificación del importe global de gratificaciones para el cuerpo de policía local por los servicios prestados y pendientes de prestar en el ejercicio 2022. El punto salió adelante por unanimidad, pero durante el debate, la oposición advirtió de “los problemas estructurales que padece la Policía Local” e incluso el propio alcalde, Jesús Villar, confirmó que “necesitaríamos 40 agentes más”.

Adrián García (Vox) quiso aclarar que “estas gratificaciones no son un regalo, pero tampoco la solución es a golpe de talonario”. El portavoz de Vox expuso que “aunque se pague a los agentes, no se soluciona el problema de inseguridad que sufren al patrullar con escasez de efectivos. Además, es muy frustrante para ellos no poder atender todas las llamadas de urgencia que reciben”.

Por su parte, Óscar Lillo (PP), recordó que “desde 2017 no se ha realizado ninguna oposición de Policía Local”, alertando que “San Vicente debería tener 106 agentes para cumplir la normativa europea, peros sin embargo tiene 86 a los que hay que restar las bajas circunstanciales”. Para Lillo, “el problema es la nefasta gestión en materia de personal y de policía”, denunciando que “no se han convocado plazas ni tomado medidas”. Por último, Mariela Torregrosa (Ciudadanos) señaló que “el problema en la plantilla es patente y ello supone un peligro para los ciudadanos y para los propios agentes”.

Ante las críticas, Villar expresó que “la primera solución es cubrir las 7 vacantes ya solicitadas”, argumentando que “el problema viene de mucho antes de 2017 cuando se cubrían plazas mediante comisiones de servicios. En esos momentos había policías suficientes, pero ahora todos los ayuntamientos necesitan policías y no pueden prescindir de ellos”. Además, el primer edil confirmó que “esta modificación será la última de este ejercicio”, a pesar de que Óscar Lillo había expresado sus dudas al respecto.