Texto de Vicente Millán (Cercle d’Estudis Sequet però Sanet)

Los heladeros xixonencs no trajeron la horchata al Raspeig. Aquí se venía elaborando desde hace más de un siglo. En la Tasca de Llorenset, se bebía con los tradicionales rollets morenos. Arriba se jugaba al monte y en la planta baja se tomaba el calentet, sentado en la llamada “cuatro esquinas” al final del primer tramo del Carrer Major. La popular taberna funcionaba desde 1891. Y un tramo más abajo el mítico Café Botella (al lado del actual El Baresito), la memoria viva del primer republicanismo sanvicentero, abierto al menos desde 1900, con su entarimado y pequeño escenario, que igual acogía el concierto de un cuarteto de cuerda que una actuación de flamenco, o un espectáculo desenfadado de vodevil. La Oficina se llamaba popularmente en los años de la II República.

El Café España era eterno, y sus bocadillos de calamar de bahía eran ya famosos en la década loca y dorada de los 20 a los 30. Siempre, desde tiempos de Juan Llopis Aliaga, el padre de Chares, supo hacer el mejor marketing, los mejores anuncios. Era el Café de los ricos, de los senyorets veraneantes alicantinos. En sus mesas se decidían los concejales del turno y se escrituraban los préstamos de los usureros locales en la visita semanal del notario de San Juan. La clase trabajadora buscaba la economía de la Bodegueta del Rollo, al lado del naciente Barri Els Trossos o el trago matiner en los bares-bodegas del remolque, en la parada del tranvía, como el Bar Cervera o la Tasca del Tio Rochet. Aparecen también la Bodega de Vicente Juan, futuro Bar Muro, y el bar de la Casa de la Democracia entre otros. Pero lo más singular es el peculiar anuncio, del año 1929, del primer bar-restaurant-burdel de la historia sanvicentera situado frente a la Cementera. Todavía se conserva el edificio y en su pavimento aún se observan los dibujos de la separación de los habitáculos.

El Cercle d’Estudis, en el Cuaderno de la Memoria-29,  ha querido invitarles a un paseo por las vivencias de los cafés, tascas y bodegas-bares más representativos de las décadas anteriores a la Guerra Civil. En un espectacular plano de una fotografía aérea del año 1929 se han localizado hasta 23 cafés, bodegas-bares, ventas-pensiones, mesones-paradores que existieron en San Vicente entre los años 1800 y 1930.

La Junta Directiva avisa: se aproximan tiempos llenos de novedades. Están invitados.