
Mutxamel ha rendido homenaje a las víctimas del atentado de ETA 30 años después de que ocurriera.
Al acto han acudido los alcaldes de Alicante, Luis Barcala, de Sant Joan, Santiago Román, de El Campello, Juanjo Berenguer y de Busot, Alejandro Morant, también el presidente de la Diputación de Alicante, Carlos Mazón y la subdirectora general de apoyo a las víctimas del terrorismo, Paloma Pérez también Antonia Moreno Ruiz, directora territorial de Presidencia de Alicante, el Teniente Comandante del Puesto Principal de Sant Joan, la inspectora jefa de la Unidad de Policía Nacional adscrita a la Comunidad Valenciana, Isabel Morel, delegada de la AVT en la Comunidad Valenciana, Fernando Ripoll, alcalde de Mutxamel en 1991 y miembros de esa corporación y Manuel Verdú, jefe de la Policia Local en 1991.
También los familiares de los tres fallecidos en el atentado, José Luis Jiménez Vargas, Francisco Cebrián y Víctor Manuel Puertas y muchos vecinos que se han querido sumar al día de recuerdo. Las familias han querido dar las gracias al ayuntamiento del municipio por acordarse del día tan señalado para ellos. “No pasa un día en que el recordemos esa fecha” dice Anabel Jiménez, hermana de unos de los asesinados al mismo tiempo que Víctor Puertas, sobrino de otro de los asesinados argumenta que nunca se podrá justificar tanto dolor y que las familias son la memoria de los que ya no están.
El alcalde de Mutxamel, Sebastián Cañadas ha dicho que los tres asesinados solo cometieron el pecado de estar trabajando y ha querido poner el foco en el apoyo y afecto a las familias.
La subdirectora general de apoyo a las víctimas del terrorismo, Paloma Pérez ha respaldado este tipo de actos ya que “los actos de recuerdo son actos de justicia” y que “la memoria es la garantía de que las organizaciones nunca se van a olvidar”.
Por último, el presidente de la Diputación de Alicante, Carlos Mazón ha expresado que la herida que los atentados de ETA provocaron en su momento sigue en los corazones de todos los alicantinos.
Para terminar el acto, se ha descubierto una placa conmemorativa y tres esculturas recordando a cada uno de los asesinados. El alcalde Sebastián Cañadas ha explicado que el monumento de homenaje a las víctimas es obra de un artista local y está compuesto por tres esculturas similares, una por cada una de las víctimas, con un elemento común que es un agujero central cuya finalidad es “poner énfasis en el vacío tan tremendo que dejaron en nuestro pueblo y en sus familias”. Cañadas y el presidente de la Diputación de Alicante han puesto a los pies de la placa una corona de laurel. Seguidamente familiares de las víctimas han ofrecido flores a los pies también de la placa.