El cierre de fronteras en Tetuán ha afectado a varios ciudadanos españoles, que se encontraban allí de vacaciones y debían haber vuelto a nuestro país en el día de ayer.
Sin embargo, fueron sorprendidos por esta situación, y sumidos en una incertidumbre que todavía se alarga para ellos y para sus familias. El sanvicentero Aarón Hernández es uno de ellos y sigue en suelo marroquí junto a sus amigos Moisés, Oriente y Raúl.
No saben si el cierre se debe a la crisis desatada por la variante ómicron o si puede existir otro motivo. “Hay gente que se está pagando vuelos, por lo que dudamos que sea motivado por el Covid, ya que les dejarían de cuarentena”, declaran los familiares de Aarón, que están desesperados y deseando que éste pise suelo español. “Es lo más importante según nos dicen, que pueda estar en nuestro territorio”, aseguran.
“Le hemos dicho que si tiene que pagar un vuelo lo haga”, añaden los familiares, que esperan que desde nuestro país se de una solución lo antes posible. El problema es que la fiebre por huir de Marruecos está disparando los precios de los billetes y las webs de las compañías aéreas están cerca del colapso.
“En la embajada española sólo han echado balones fuera y no nos han dado ninguna solución”, declara el propio Arón. Ryanair, la compañía que tenían contratada, les canceló el vuelo sin previo aviso y les daban otro dos semanas después, a partir del día 14 de diciembre. Ante la posibilidad de pasar las Navidades fuera de casa, Aarón y sus compañeros de viaje han decidido contratar un vuelo desde Tánger a Málaga para este viernes, que les ha costado casi 300 euros por persona. Antes deberán buscar forma de desplazarse a Tánger y posteriormente también cubrir el trayecto entre Málaga y Alicante.
Por el momento, se han creado grupos se whattsapp donde personas que se encuentran en la misma situación comparten información. Un viaje de ocio se ha convertido en una odisea y nunca antes, Aarón y su familia habían deseado tanto estar juntos en casa.