
Tras la novena y la procesión y por tercer año consecutivo sin besá, la Mare de Déu de Loreto de Mutxamel ha vuelto a su capilla donde ya la preside.
Ayer por la tarde tuvo lugar la misa en honor a la Mare de Déu de Loreto en la parroquia de Mutxamel a la que asistieron vecinos y autoridades como gran parte de la corporación municipal con el alcalde Sebastián Cañadas a la cabeza además de miembros de la cofradía y los cargos festeros y Comisión de Fiestas de Moros y Cristianos de Mutxamel.
La Mare de Déu volvió a salir a las calles de Mutxamel, esta vez por última vez hasta septiembre. Aún sin la tradicional besá, muchos vecinos se acercaron para hacer una reverencia a su virgen que ya descansa en su capilla tras todos los actos desde el pasado 28 de febrero.