En San Vicente del Raspeig hubo, al menos, cuatro mujeres guardabarreras: Antonia Barberá, Aurora Lillo Barberá, María Garrigós Yague y La Jacoba, esposa d eun mozo de agujas. Tuvieron que sufrir todo tipo de penalidades para poder sacaer adelante su familia. En nombre de todo su gremio, este premio propuesto por el MUDIFE (Museo Didáctico del Ferrocarril) es más que merecido.
PREGUNTA: ¿Qué supone este galardón para el museo del ferrocarril?
RESPUESTA: Para el MUDIFE supone un importante reconocimiento a la labor que realiza de poner en valor aquellos aspectos del ferrocarril relacionados con nuestra población.
P: ¿Cómo era esta labor en aquellos tiempos?
R: La labor que desarrollaban las guardesas fue muy importante para el ferrocarril pero muy dura y en condiciones muy difíciles para poder conciliar trabajo y familia.
P: ¿Quiénes fueron las guardesas de San Vicente y por qué su memoria debe perdurar en el tiempo?
R: En este reconocimiento a las mujeres guardesas recordamos a Antonia Barberá Aurora Lillo Barberá, María Garrigos Yague y La Jacoba.
“El recuerdo y el ejemplo de unas mujeres valientes que tuvieron que desenvolverse en un mundo exclusivamente de hombres”
P: ¿Qué supone para la historia de un municipio salvaguardar la memoria de estas trabajadoras?
R: La memoria a estas trabajadores es la memoria de San Vicente. Es el recuerdo y el ejemplo de unas mujeres valientes que tuvieron que desenvolverse en un mundo exclusivamente de hombres como era el del ferrocarril.
P: ¿Qué era lo más difícil de ser mujer en aquella época?
R: En aquella época ser mujer en términos personales era complicado, pero en términos laborales fue realmente muy difícil.
