Pascual Andrés Tévar
En estos de libertades en todos los sentidos y con todos los debates abiertos, en relación con el partido de fútbol Valencia – Real Madrid, del pasado día 21-05-2023, a veces, es imprescindible, detenerse, a nivel individual, y colectivo, para pensar en los derechos humanos, y concretamente en ganar, definitivamente, que el RACISMO SALGA PARA SIEMPRE de la convivencia libre y pacífica de nuestra sociedad, y de nuestra libre y abierta y generosa y solidaria convivencia.

Yo soy Vinicius, cuando estoy en casa, y siento dolor interior, que en la sociedad actual, todavía se padezca el sufrimiento del RACISMO, y lo que repercute y sacude a la familia que lo padece, y se siente apartada de la sociedad.
Yo soy Vinicius, cuando en el trabajo de cada día, pienso en esos hombres y mujeres, que no pueden ejercer con libertad y con igualdad el trabajo, porque el RACISMO, les aparte de forma violenta en la forma de ejercer su libertad, y sus vivencias, aunque sea de forma sutil, y casi imperceptible.
Es hora y momento, de superar la intolerancia, de quienes no entienden, que todos cabemos en la sociedad, sea cual sea su color, y que la libertad se gana cada día, sabiendo aceptar a todas las personas, sea cual sea su color, porque el verdadero color, está en los valores que defendemos y profesamos desde la libertad, la tolerancia y el sentido responsable de la vida.
Es hora y momento, de sacar las sonrisas abiertas, y demostrarnos, que el RACISMO, no puede tener cabida nunca, en nuestra forma de entender la vida, y al mismo tiempo, ser capaces de apartarlo de cualquier atisbo, que lo saque a relucir, por cualquier acto, o forma de pensar, pacíficamente.
Pero de forma tan decidida, que los quieran practicarlo, sientan la fuerza de la razón de una sociedad claramente libre y responsable, que gana siempre, la batalla de la convivencia y de la libertad en todos los sentidos.
Es hora y momento, que desde la educación y la cultura, con nuestros niños y niñas, sepamos de forma, inculcarles, son responsabilidad, sentido común, y libertad, los valores de que les van a convertir en ganadores, ante cualquier amenaza de RACISMO. Porque tendrán la mejor arma para defenderse, que es la educación en los valores, que asientan con firmeza, una sociedad libre, con sentido incuestionable de la responsabilidad, de la tolerancia, y de la solidaridad, sin tapujos, ni cortapisas.
Así que, lo sucedido en un partido de fútbol en Valencia, sea el principio del fin de cualquier amenaza del RACISMO en nuestra sociedad, en España, y en el Mundo, y el convencimiento, que habremos entendido, de una vez por todas, que somos capaces de apartar para siempre de nuestra convivencia esa violencia, y animados siempre, con el espíritu invencible de nuestra
increíble luz mediterránea.