
Un día especial fue para todos, no sólo para RAPHAEL, pues habían ganas de salir por la noche y vivir lo que el mundo nos da cuando el sol ya se esconde y, por supuesto, que este artista monumental nos cantara sus dulces canciones a la luz de la luna.
A partir de ahí cada uno lo vivió a su manera.
Lo cierto es que la expectación era máxima ya que, con el cartel de no hay billetes colgado, el espectáculo estuvo al borde de la cancelación después de que el jienense tuviese que csuspender 3 conciertos por recomendación médica debido a problemas con su voz.
Afortunadamente para el respetable, algunos de los cuales tenían la entrada desde principios de año, el artista comunicaba prácticamente sobre la campana que retomaba la gira después de que el médico le diese el alta 2 días antes del concierto de Alicante.

Y es que RAPHAEL ha demostrado siempre su compromiso con el público, y sigue al pie del cañón después de 60 años de carrera y a pesar de los graves problemas de salud que ha sufrido.
Claro que sí Raphael, “palante, siempre palante”.

El público llegaba pronto a los “Jardines de Abril” de Sant Joan para vivir la experiencia completa que nos ha ofrecido este espectacular FESTIVAL NOCHES MÁGICAS, en un entorno realmente mágico , y disfrutar de la mejor gastronomía, las exposiciones de pintura y arte, o el mercado de artesanía, mientras la velada previa era amenizada por DAVID PRADA en el escenario Nordés.
Pero tras los prolegómenos, era el turno de gozar con el jefe.
La banda salía puntual al escenario, mientras sonaba la intro, hasta que RAPHAEL hacía su aparición y saludaba al público con sinceros gestos de agradecimiento, mientras el respetable le devolvía el gesto con un aplauso casi interminable.
Dos horas de concierto, con un repertorio de 25 temas, ahí es nada para un artista que ya ha cumplido las 80 primaveras, y que no paró de moverse por el escenario y de bailar como ya nos tiene acostumbrados desde la primera hasta la última canción; muchos aristas jóvenes no son capaces de mantener semejante ritmo.
Se le notaba en la cara a RAPHAEL que disfrutaba regalando al público cada uno de los temas que iban desgranando el show, obras de arte indiscutibles de la música española, cada una de las cuales superaba a la anterior.













“La Noche”, “De tanta gente”, “Yo sigo siendo aquél”, “Cierro mis ojos”, “Digan lo que digan”, “Mi gran noche”, “A punto de besarte”, “La canción del trabajo”, “Estuve enamorado”, “A que no te vas”, “Amor mío”, “Lo saben mis zapatos”, escrita por Pablo López, “Victoria”, tema que da nombre a su último disco, “Cuando tú no estás”, “La quiero a morir”, una magistral versión de la canción popular mexicana “La Llorona” que popularizara Chavela Vargas, “Gracias a la vida”, “Estar enamorado”, “Se nos rompió el amor”, “En carne viva”, “Frente al espejo”, “Qué sabe nadie”… himnos de toda una vida.
Un repertorio sincero, de principio a fin, en el que el artista se muestra tal y como es, tal y como ha sido siempre, con su obra, ni más ni menos. Canciones para las que no pasa el tiempo, y que siguen tan jóvenes como siempre, tal y como lo demostraba un público, de todas las edades; como parece no pasar el tiempo para RAPHAEL.
El concierto terminaba sin artificios, sin necesidad de bises, porque el artista ya se había vaciado dándolo todo a su público, y lo hacía en todo lo alto con otros tres grandes temas como “Yo soy aquél”, “Escándalo”, y “Como yo te amo”.
Ciertamente no olvidaremos esta noche ideal, en la que reímos, soñamos y bailamos, que nos hizo olvidar la tristeza y el mal, y las penas del mundo, pudiendo disfrutar de la vida mientras escuchamos los violines cantar en esta noche sin rumbo.
Realmente RAPHAEL es de tanta gente…es patrimonio de todos.
Muchas gracias RAPHAEL por esta gran noche.
Para completar la velada de los más osados, pudieron bailar los temas más clásicos en la Remember Party, a cargo de JES SET hasta la madrugada.

El FESTIVAL NOCHES MÁGICAS ponía así un broche de oro en su programación, cerrando su edición de este año con el festival de música indie “Music in the garden” y el concierto de “Miguel Campello”, todo ello en la misma semana.
Con más de 25.OOO asistentes, a pesar del aforo reducido debido al formato del festival, y un impacto económico directo e indirecto de 2,5 millones de euros, este festival ya se ha consolidado como uno de los eventos destacados en el verano musical de nuestro país.

Estamos deseando que empiece una nueva edición.