Almorçarets Sanvicenteros – Vicente Llopis Pastor
Durante las últimas semanas hemos seguido con los habituales apartados de “Rincón poético”, historias de San Vicente del Raspeig durante el primer tercio del siglo XX y algunos apuntes históricos, filosóficos y humanísticos.
Vicente Llopis Pastor hizo de ponente en un apartado sobre Fernando VII (1784-1833), que llegó a ser Rey de España después de José I Bonaparte (1768-1844), hermano de Napoleón I Bonaparte (1769-1822), Emperador de Francia, que puso a su hermano José en el trono de España. Fernando VII ha sido considerado como “el rey felón” y el peor de los monarcas que ha tenido España a lo largo de toda su historia, desde antes de los Reyes Católicos hasta hoy. Con él perdimos las colonias americanas; gobernó de forma absoluta sin tener en cuenta la Constitución de 1812; anuló la Pragmática Sanción que establecía que las mujeres no podían acceder al trono, debido a la llamada “Ley Sálica” que había adoptado la dinastía de los borbones de Francia; gobernó sin hacer caso del Parlamento, aunque de 1820 a 1823 simuló que seguía los dictados del Congreso de los Diputados y el Senado, lo cual duró muy poco tiempo, ya que en 1823, un ejército francés llamado “Los cien mil hijos de San Luis”, al mando del Duque de Angulema (1775-1844), cortó de raíz toda la falsa democracia y restituyó la monarquía absoluta en la figura de Fernando VII. Como rey absoluto gobernó personalmente mediante Reales Órdenes, donde el trato a los españoles fue bastante vejatorio y la anulación de la “Pragmática Sanción” supuso que su heredera al trono fuera su hija Isabel (1830-1904), cuando según las leyes españolas el trono correspondía al hermano de Fernando VII, Carlos María Isidro de Borbón (1788-1855), lo que provocó las llamadas “guerras carlistas” que duraron cerca de cien años y durante las cuales España quedó marginada en el progreso e industrialización de aquellos momentos.
Esta forma de gobernar de Fernando VII se puede comparar con la del actual Gobierno español, el cual hurga en la Constitución para interpretarla a su manera, gobierna por Reales Decretos; posiblemente cuartee España mediante las Comunidades Autónomas; crea nuevos impuestos a las empresas, con lo cual limita la capacidad de crecimiento y desarrollo de nuestra economía y otras decisiones que está tomando y que, a poco que las analicemos, tienen cierta similitud con los tiempos del Rey Fernando VII.