UN RATO EN URGENCIAS DESAFIANDO LIMITACIONES

Pascual Andrés Tévar

El pasado día 03-10-2024 me invadió un cansancio total, y con fiebre subiendo, que no tuve más alternativa que solicitar un taxi, y con la compañera de mi vida, ir a urgencias del Hospital General Universitario Dr. Balmis, en Alicante, entrando en el mismo a las 19:24, y saliendo a las 22:52 horas, con el diagnóstico de neumonía adquirida en la comunidad. Y quiero transmitir lo que te puede cambiar la vida, o al menos sentir las sensaciones de que algo está diciéndote, en voz escondida y clara, que las limitaciones se están dando a conocer.

Claro está que, a los 74 años, no estamos para tirar cohetes, con las rodillas y los controles médicos instalados desde la jubilación del pasado mes de enero, y otras historias, para las que ya estaba mentalizado, que las alegrías físicas estaban cambiando, sin marcha atrás. Pero este hecho me pilló fuera de juego, cuando empecé a sentirme invadido por un cansancio tan total, que casi no podía caminar tres pasos. Pero tuve fuerzas para coger el taxi y dirigirme a urgencias. Entre tanto, los pensamientos se iban en todas las direcciones, pero al tenerla a mi lado, me controlaba a mi manera, y de alguna forma me sentía protegido.

Después de muchas pruebas y auscultaciones, y por supuesto con la mascarilla todo el rato, me llaman para que pase a un box, o como quieran llamarlo, y me piden que quite la ropa, que me ponga una bata de hospital y me acueste en la cama preparada. Y comienzan a ponerme vías en el brazo, lo que ya me hizo pensar que la cosa era complicada, pero al mismo tiempo, como no me pusieron aparato para respirar, sentí alivio, y al mismo tiempo me fui mentalizando. Entre tanto, la miraba, y al ver su rostro y sus ojos serenos, sentía la calma suficiente para confiar en que estaba en buenas manos.

Conforme pasaban las horas y las pruebas continuaban, la mente iba por su cuenta, y los miedos, las dudas y las luchas internas se sucedían sin que los pudiera controlar del todo. Porque hacía mucho tiempo que no estaba en una situación así, y te invaden los fantasmas de la ansiedad, como una especie de montaña rusa. Y, por otra parte, soy consciente, desde hace tiempo, de que las limitaciones físicas me están avisando; menos mal que procuro tener la mente a salvo, especialmente desde que me he jubilado. Y ahí ya tengo un buen reto cada amanecer.

Con el paso de las horas acostado de mala manera en la cama del box, se me hacían eternos los minutos, y ni siquiera me quitaba la ansiedad el enorme trasiego de camas con enfermas y enfermos, de camas vacías, de médicos y médicas, y de personal sanitario, de voces coloquiales en sus conversaciones animadas, porque al fin y al cabo están trabajando y viviendo las horas el personal sanitario. Porque un silencio sería tremendo para la mente. Y de vez en cuando, la miraba a mi lado, y hasta cuando se iba a dar un pequeño paseo para combatir el aburrimiento, la seguía con la mirada, como si me fuera la vida en ello. Porque necesitaba, como el comer, sentirla a mi lado siempre.

Cuando por fin viene el doctor encargado de mi atención médica y personal, entiendo que ha hecho con su equipo un buen trabajo, y nos informa que es una neumonía adquirida en la comunidad, es decir, que ha entrado desde fuera en mis pulmones y que tiene un tratamiento, y, eso sí, un proceso largo para luchar contra el cansancio; y al mismo tiempo me dice que me da de alta hospitalaria y puedo irme a casa, y me siento tan animado que el vestirme, con ayuda, fue un coser y cantar. Y, por otra parte, tengo claro que la vida me ha dado otra oportunidad, de la que tengo que aprender, a ser consciente de mis limitaciones. Pero eso sí, no perder la moral en ningún momento y adaptarme a las consecuencias.

Cuando al día siguiente acudo a la doctora de cabecera, me habla claro, y me dice que tengo que cumplir a rajatabla con el tratamiento día a día. Y me deja más claro todavía que el cansancio no se va a ir con la finalización del tratamiento, sino que seguirá mucho tiempo más. Y ya es mi lucha y buena disposición las que harán posible la recuperación para la vida normal y sus circunstancias. Lo que más siento es que en este tránsito, las cervezas y las copas no son bienvenidas. Y tengo la obligación y el sacrificio de prescindir de ellas, y mentalizarme con el agua y el Aquarius, y cosas por el estilo, porque la cerveza sin alcohol no le encuentro sentido. Pero, como no me queda otra, me lo tomo con filosofía, porque comer bien lo necesito, pero sé que me va a costar sin el acompañamiento acostumbrado.

En consecuencia, consciente del cansancio que me persigue, procuro caminar bastante menos, pero sigo con mis rutinas de los desayunos en mis sitios preferidos, y las comidas me las traigo a casa, obligado, mientras dure el tratamiento; o tal vez cambien cuando me acostumbre a controlar el cansancio. Y después, pues veremos, poco a poco, cómo recupero una vida normal, eso sí, con más control y sosiego. Y tengo que decir que en este camino de la recuperación, el ánimo constante de los AMIGOS y AMIGAS me llena el depósito de moral y de fe para seguir adelante, y que no me canse de luchar.

Así que, la vida me ha puesto a prueba, como queriendo decir que es necesario ser consciente de que tengo unas limitaciones, con las que tengo que mentalizarme para continuar el camino de la vida. Pero, por otra parte, si soy capaz de asumirlo en todas sus consecuencias, puedo seguir con ilusión en los retos y en los desafíos, y enfrentarme a ellos a mi manera. Siendo consciente de que la mente me puede ayudar para que las limitaciones físicas no me quiten ni un gramo de moral, con la pasión y la ilusión que me transmite nuestra increíble luz mediterránea.

Somos podcast

Diputación de Alicante

Somos podcast

El tiempo en San Vicente del Raspeig

Punts verds y ecoparc Sant Joan d'Alacant 2024

Cableworld San Vicente

EVEALIA

Cableworld El Campello

Lasaroca

El tiempo en Mutxamel

Cartelería cine La Esperanza

Campaña basura perros gatos Sant Joan

Cableworld Sant Joan

¿Buscas un plan?

OCIO ALICANTE

Somos L'Alacantí

Lo último