Mariela Torregrosa, concejala de Derechos Sociales del Ayuntamiento de San Vicente del Raspeig, es una voz clave en la lucha contra la violencia de género en el municipio. En el marco del Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra la Mujer (25N), Torregrosa reflexiona sobre el impacto de esta lacra social, la importancia de la educación y la necesidad de seguir trabajando en la prevención y el apoyo a las víctimas. Con un programa que busca implicar a toda la ciudadanía, la edil subraya un mensaje contundente: «Si duele, no es amor».

1. ¿Cuál es el enfoque principal de la programación organizada por el Ayuntamiento de San Vicente para conmemorar el 25N este año?

El de visibilizar una realidad de la violencia que se ejerce contra la mujer. Esa violencia existe, no solo porque haya datos, que los hay y son aterradores, sino porque detrás de esos datos hay mujeres, con nombre y apellidos, que están sufriendo o que ha sido asesinadas. 

2. ¿Qué actividades o eventos destacaría dentro de esta programación?

En mi opinión, toda la programación es importante porque contribuye a dar a conocer la violencia contra la mujer a través de distintos medios, ya sea con exposiciones, representaciones o con cortos y charlas. Al final, cada una de las actividades programadas llega a nuestros vecinos, de un modo u otro, y eso es lo importante.

Este año hemos querido ir de la mano de otras entidades, como Cruz Roja, que participará con una actuación del Grupo Empoderamiento. También es importante que los jóvenes tengan una presencia destacada. Por eso, centros educativos como el IES San Vicente colaborarán y, otro año más, agradezco la labor de la Plataforma por la Igualdad. El programa que llevaremos a cabo estos días con motivo del 25N es también una muestra del trabajo que se realiza desde todas estas entidades y desde la concejalía de Derechos Sociales.

3. ¿Qué expectativas tiene en cuanto a la participación de la ciudadanía en las actividades del 25N? ¿Se han propuesto acciones para involucrar a diferentes públicos, como jóvenes, adultos mayores o colectivos vulnerables?

Expectativas no tengo, deseo que llegue al máximo número de personas, eso sí, porque es importante que vean, que oigan y que luego reflexionen. Respecto a involucrar a diferentes públicos, la programación está abierta a toda la ciudadanía, pero también a lo largo del año intentamos llegar al mayor número de personas con diferentes actividades porque, evidentemente, es un tema de gran calado social.

5. Desde el Ayuntamiento, ¿cómo se está trabajando en la sensibilización y prevención de la violencia de género en el día a día, más allá de las actividades del 25N?

A lo largo del año se ofrecen distintas actividades de forma permanente, como el grupo de empoderamiento de Cruz Roja, el teatro social abierto a adultos y adolescentes o diferentes propuestas realizadas en los coles, como charlas o cuentacuentos.

Agradecer al personal docente su colaboración y, por supuesto, a las profesionales de la concejalía de Derechos Sociales que están al frente de todas estas acciones y, además, atienden y acompañan con sensibilidad, constancia e implicación a mujeres que son víctimas de violencia.

6. ¿Teme que se politice este día?

Si, para que voy a decir lo contrario. La violencia contra la mujer, en mi opinión, ya se ha politizado creando posicionamientos que lo único que hacen es perjudicar a las víctimas. Pienso que, en el tema de la violencia de género, al igual que con respecto a cualquier otro, en el momento en el que no quieres escuchar ni llegar a acuerdos, se produce un perjuicio para las personas afectadas.

Todos entendemos que la violencia es violencia y hay que trabajar para erradicarla, pero, cuando se detecta un tipo de violencia que se da por una circunstancia en especial, hay que trabajarla de forma particular y no de forma general. Y debemos hacer todo lo que está en nuestra mano, que no siempre es todo lo que nos gustaría, evidentemente.

En mi opinión, el movimiento se demuestra andando, por lo que desde esta administración vamos a seguir trabajando e intentando que todos los grupos políticos se unan en esta causa.

7. ¿Se están implementando nuevas estrategias o recursos para mejorar la atención y el apoyo a las víctimas de violencia de género en San Vicente?

Seguimos prestando los mismos servicios, si bien es cierto que, en estos últimos meses, se está realizando un acompañamiento individualizado de las victimas por parte de una agente de Igualdad. Nuestro compromiso es seguir prestando toda la ayuda posible a las víctimas. Este es un trabajo en el que debemos ir de la mano todas las administraciones.

8. ¿Considera que existe alguna área específica de mejora en la lucha contra la violencia de género en el municipio? ¿Qué desafíos enfrenta el Ayuntamiento en esta área? 

El desafío al llegar fue dotar de personal al área de Derechos Sociales y queremos que esa tendencia siga para consolidar el equipo necesario. Con los recursos disponibles, vamos avanzando día a día, conscientes de que no hay que dejar de apostar por esta área de trabajo mientras sigan existiendo víctimas.

9. ¿Qué papel considera que tiene la educación y la sensibilización en el ámbito escolar para prevenir la violencia de género? ¿El Ayuntamiento tiene planes o programas en colaboración con los centros educativos de San Vicente?

La educación es primordial. Estamos intentando llegar a nuestros niños y jóvenes para que interioricen el respeto a las personas. Nadie es más que nadie. No podemos crear generaciones encasilladas. Yo soy madre y quiero que mi hijo sea libre y, para eso, se le tiene que respetar y, a su vez, él tiene que respetar. Si conseguimos eso, no habrá sentimientos de posesión ni de superioridad o inferioridad. Al final eso es la igualdad. Por eso pretendemos seguir trabajando en colaboración con los centros y con los profesionales en la materia que nos pueden aportar muchísimo para saber qué línea debemos seguir.

10. Por último, ¿qué mensaje le gustaría transmitir a la ciudadanía de San Vicente en este 25 de noviembre?

Que piensen en las mujeres que son víctimas de violencia y en las que han fallecido. Que empaticen y se pongan en su lugar. Que intenten sentir lo que ellas sienten o han sentido. Que piensen que pueden ser sus madres, hermanas o parejas. Que pueden ser ellas mismas. Que solo piensen en eso y en nada más. Creo que así, en algunos casos, se tendrá una visión distinta.

Nuestro lema este año es claro: “Si duele, no es amor”. Con un mensaje tan explícito queremos llamar a la reflexión y también trasladar a todas las mujeres que nos tienen a su disposición y que hay muchos profesionales volcados en ayudarlas.