
A pesar de las recientes mejoras en la pista deportiva, los problemas en el Parque Albayna continúan generando descontento entre los vecinos, especialmente entre aquellos que tienen perros. Denuncian que el pipican es muy pequeño y no lo pueden usar, además critican la presencia de cristales rotos y residuos en el área. Esto ha obligado a los propios dueños de los perros a recoger los peligrosos objetos para evitar accidentes tanto a personas como a los animales.
Uno de los principales reclamos de los vecinos es la falta de un espacio adecuado para que los perros puedan disfrutar de la libertad de correr y socializar sin peligro. Los propietarios piden la creación de un parque canino, que permita el uso de una zona del parque para todos los ciudadanos, tanto los que tienen mascotas como los que no. Este espacio específico también permitiría que los perros estuvieran bajo control, evitando que se escapen hacia la carretera, como sucede actualmente debido a las vallas y puertas rotas en el parque.

Con el objetivo de presionar al Ayuntamiento de El Campello, los vecinos han iniciado una recogida de firmas que ya ha logrado sumar más de 300 apoyos, y que continuará en los próximos días.