En un contexto político en el cual todos los días amanecen con un nuevo escándalo de corrupción del PSOE, el Grupo Municipal VOX de San Vicente exige hechos y no palabras. Lo que antes era tachado de “bulos” o “fango”, ahora son hechos que constan en los sumarios e informes policiales y revelan una corrupción sistémica del partido socialista cuyos dos últimos secretarios de organización protagonizan una sórdida trama de comisiones ilegales, prostitución y prevaricación a todos los niveles.
Si a esto unimos que el círculo familiar más íntimo de Pedro Sánchez también está siendo objeto de investigación penal y que tanto Santos Cerdán, Koldo y Abalos formaban parte del núcleo duro del partido socialista junto al propio Sánchez, los sanvicenteros esperaban que la reacción de Asun Paris y los socialistas de San Vicente sea mucho más contundente y se dirija a la raíz del problema. Todo lo que no sea pedir la dimisión de Pedro Sánchez, y la convocatoria urgente de elecciones, no es más que un intento de quedar bien cara a la galería y una tomadura de pelo a los ciudadanos.
Sin embargo, desde VOX sabemos que las “decisiones tajantes contra la corrupción política” que mencionaba la socialista Asun París en un comunicado reciente, no son más que palabras vacías. De hecho, el partido socialista de San Vicente mantiene como concejal y afiliado al partido a quien fuera alcalde durante 8 años, Jesús Villar, que como es de sobra conocido «se encuentra inmerso en un procedimiento penal con petición de penas, por parte de la Fiscalía y la acusación particular ejercida por quien fuera el Letrado del ayuntamiento, por los presuntos delitos de prevaricación administrativa.»
El pasado mes de enero, VOX presentó en el pleno municipal una moción contra la corrupción en la que se pedía condenar firmemente cualquier muestra de corrupción. Respecto a esta moción, tanto los de Asun París como sus colaboradores habituales de Eu-Podem y Compromís, votaron en contra, lo cual tampoco puede sorprender a nadie dado el curso de los últimos acontecimientos en el seno del partido socialista.
Por todo ello, si la representante socialista Asun París quisiera redimirse de su voto contrario a la condena de la corrupción, lo que debería hacer son dos cosas: Por un lado, exigir la dimisión de Pedro Sánchez y la convocatoria de elecciones y, por otro, pedirle a Jesús Villar la renuncia del acta e instar su baja como afiliado. Todo lo que no sea esto, no son más que palabras vacías para intentar sobrevivir a los múltiples escándalos del PSOE y engañar a un pueblo sanvicentero cada vez más harto de tanta corrupción.
Desde Somos Raspeig queremos añadir que tras contrastar la información con Jesús Villar, aludido en este texto, nos ha comunicado que en el próximo pleno responderá a estas acusaciones y que mientras tanto está dejando trabajar a la justicia y confiando en que prevalecerá su inocencia.
