El pleno ordinario del mes de julio en el Ayuntamiento de Sant Vicent del Raspeig ha aprobado dos de las tres mociones impulsadas por la izquierda relacionadas con las personas migrantes. Los dos textos que han salido adelante con los votos favorables de PSOE, EU-Podem y Compromís, junto con la abstención del PP, se centran en condenar los discursos de odio hacia personas migrantes después de la brutal agresión a una persona mayor ocurrida en el municipio murciana de Torre Pacheco. Por contra, PP y Vox rechazan recuperar los cursos de español para extranjeros en la EOI y a que se facilite el acceso de las personas que viven en centros de acogida.

En concreto, la propuesta de los socialistas que se ha aprobado, recoge la reprobación de las palabras realizadas por la concejala de Vox, Yolanda Iborra, quien se desplazó a dicha localidad para instar en un vídeo a la sociedad a “plantarse” para que “no nos quiten el país”. El texto, al que el Partido Popular no se ha opuesto, condena la postura contra los discursos de odio y la criminalización que está ejerciendo la extrema derecha contra las personas migrantes, en las que constantemente está relacionando la inmigración con delincuencia e inseguridad.
En su intervención, la portavoz del PSOE Asun París ha indicado que España está viviendo un “preocupante” repunte de los discursos de odio, instigados de forma organizada por sectores de la extrema derecha, especialmente por Vox, pues “esta formación ha convertido la inmigración en el eje de su narrativa xenófoba, criminalizando a personas por su origen y sembrando odio en barrios y pueblos”.
Así, sostiene que la extrema derecha ha consolidado “una red de difusión del odio” que opera tanto en España como en coordinación con la ultraderecha internacional. “Promueven términos como emergencia migratoria o invasión criminal, sin respaldo alguno en datos oficiales”, ha apostillado la edil socialista, quien ha desmontado con datos y cifras los bulos y discursos falsos sobre las ayudas a inmigrantes fomentados por Vox.
“Los ultras no propone soluciones, propone enemigos. Su estrategia busca romper los lazos de convivencia, generar odio colectivo, estigmatizar y normalizar discursos fascistas. Utilizan cualquier hecho aislado para culpabilizar colectivos enteros, sin pruebas, sin contexto, sin ética”, ha indicado París, quien también se ha referido a las palabras de Yolanda Iborra (Vox) en un vídeo en redes sociales: “esta instrumentalización no es libertad de expresión. Es violencia simbólica y social”.
Por último, París critica que Vox involucre la inmigración con la violencia y la inseguridad, pues la mayoría de personas que llegan a España lo hacen huyendo de conflictos bélicos en sus países y que buscan trabajar. “Muchas de estas personas cuidan de nuestros mayores, limpian en las casas, o se dedican a la hostelería. San Vicente debe seguir siendo una ciudad abierta, tolerante, acogedora y plural, sin actitudes racistas ni discurso de odio”, zanja.
INCLUSIÓN LINGÜÍSTICA
Por contra, PP y Vox han rechazado la moción de PSOE y Esquerra Unida-Podem en la que solicitaban a la Generalitat Valenciana que se recupere “con carácter de urgencia” los cursos de español para extranjeros que había en la Escuela Oficial de Idiomas y que, a su vez, el Consistorio realice los trámites para que se facilite el acceso de las personas migrantes que viven en los centros de acogida.
Igualmente, el texto buscaba que Sant Vicent del Raspeig sea declarado ‘Municipio por la Inclusión y la Convivencia’, con el objetivo de rechazar cualquier discurso o práctica política basada en la exclusión, racismo, xenofobia, odio o la criminalización de las personas refugiadas.
El concejal del PSOE, Eugenio Toledo, ha defendido en su intervención que la ciudad “ya es un referente en la red de municipios acogedores, con dos centros que están prestando un servicio esencial”, pero que sin embargo, “acoger no basta”, pues “lo verdaderamente transformador no es alojar, sino integrar; no es asistir, sino incluir”.
Precisamente, el edil socialista ha defendido que esta propuesta estaba avalada por los profesionales docentes y que se refrendó precisamente en el último Consejo Escolar Municipal. “Sin dominio del idioma no hay acceso al empleo, no hay escolarización efectiva, no hay participación ciudadana, no hay convivencia posible. Por eso, la supresión de los cursos de español para extranjeros en la EOI de San Vicente supone una auténtica emergencia social”, ha zanjado.