Con algo de retraso sobre el horario previsto, y a bordo de un vehículo clásico de bella factura y escoltado por la Policía Local, ayer por la tarde llegó a la Plaza de la Constitución de El Campello el popular Papá Noel, que fue recibido oficialmente por el alcalde, Juanjo Berenguer, y otros concejales del Ayuntamiento de diversos partidos políticos.
Pero los realmente importantes era los niños y niñas que, desde primera hora de la tarde, empezaron a hacer cola junto a la caseta levantada en la misma plaza, donde el personaje más querido de estas fiestas navideñas recibirá durante cuatro días a los pequeños que quieran entregarle sus cartas con relación de regalos que esperan o simplemente hacerse una fotografía con él.
Jovial y risueño, como corresponde, Papá Noel llegó un año más a su cita con El Campello, y recibió de manos del alcalde las llaves de la que será su casa hasta el próximo domingo.
Decenas de niños y niñas, acompañados de sus familias, esperaban su anunciada llegada, y todos fueron saludados por él y sus conocidos elfos. Las caras de alegría, de felicidad, de nervios y de sorpresa bien merecían la pena.
La caseta, en la que se vive la auténtica magia de la Navidad, estará abierta hoy desde las 17:00 a las 21:00 horas, el sábado de 10:00 a 14:00 y de 17:00 a 21:00 horas, y el domingo, también de 10:00 a 14:00 y de 17:00 a 21 horas.
Como siempre, la entrada a la casita para saludar a Papá Noel será por riguroso orden de llegada, a excepción de los niños y niñas que sufran enfermedades como autismo, síndrome de Asperger o similares, que tienen siempre prioridad. En estos casos, sus progenitores o adultos con los que vayan acompañados únicamente tienen que comunicarlo a alguno de los elfos, y accederán de inmediato.