El concierto se centró en piezas acordes a la festividad religiosa con conocidas marchas procesionales
Con el corazón partido. Ese es el sentimiento imperante en el auditorio de la Casa de Cultura de El Campello durante el concierto de música sacra ejecutado por la Associació Musical L’Avanç, único acto al margen de oficios religiosos que integra el programa de esta atípica Semana Santa 2021.
Los asistentes disfrutaron de la música, pero con la certeza de que por segundo año consecutivo, tampoco habrá Semana Santa obligados por la pandemia sanitaria. No habrá procesiones ni ofrendas, pero la concejalía de Fiestas y Tradiciones que dirige Cristian Palomares (PP), organizó el concierto, con aforo limitado y sujeto al cumplimiento de todas las normas sanitarias.
Al acto no faltó el alcalde Juanjo Berenguer y buena parte de su equipo de gobierno, en esta ocasión con una delegación integrada por los concejales Cristian Palomares, Marisa Navarro, Dorian Gomis, Maricarmen Alemañ (PP), y Mercé Pairó (Cs).
Aunque la celebración de la Semana Santa ha quedado suspendida en todo el país, coincidiendo con la festividad del Domingo de Ramos se celebró este concierto bajo la dirección de Luis Seguí, y la sublime participación de la soprano Herminia Ripoll, que emocionó al auditorio.
El concierto de la banda campellera se centró en piezas acordes a la festividad religiosa (música sacra), con composiciones de Bach y conocidas marchas procesionales. Herminia Ripoll ha puesto voz a los Ave María de Gounod y Schubert, y unas saetas ante las que han asomado no pocas lágrimas entre los espectadores.
