César Ponce / Somos Raspeig
En la mañana del miércoles 1 de junio, Fernando Monllor y Domingo Verdú presentaron en el Ayuntamiento de San Vicente las 1000 firmas recogidas con el objetivo de que no sea demolida y anulada la fuente de la rotonda de la carretera de Agost.
Ambos vecinos emprendieron la recogida hace varias semanas y la entrega coincidió con la publicación días atrás de la consulta pública realizada por el ayuntamiento en la que la alternativa más respaldada, con un 53,86% de los votos, fue la creación de un nuevo parque urbano accesible peatonalmente.
Dicha consulta obtuvo la participación de 263 respuestas online, pudiendo votar personas no residentes en el municipio, según averiguaron los citados vecinos (aseguran que pudieron votar personas de otras localidades y que pudieron realizarlo varias veces a la misma propuesta). Por tanto, consideran que estas conclusiones no deben tener validez y en contraposición aportan mil firmas con participación espontánea de asociaciones, comercios, entidades culturales, entidades festeras, entidades deportivas, empresas y particulares (todas con nombre, apellido, DNI, mayores de edad y residentes en San Vicente).
Por tanto, ente el anuncio por parte del área de Parques y jardines de seguir adelante con la elaboración de un documento técnico que sirva de anteproyecto, solicitan que no se proceda a demoler la fuente y que se realicen actuaciones encaminadas a ponerla de nuevo en marcha en las condiciones adecuadas. Piden además que se establezcan, de acuerdo con los vecinos de la zona, los horarios de funcionamiento durante el día, para que sin ser molestados, se convierta en foco de atracción beneficiando económicamente al entorno.
La oposición se ha manifestado al respecto y desde Ciudadanos, Pachi Pascual, ha vuelto a reclamar al tripartito que «no siga adelante con el proyecto de eliminar la fuente, ya que no es un tema prioritario para los vecinos de San Vicente, hay otras muchas cosas más urgentes en las que gastar el dinero público y además no hay ningún consenso ciudadano sobre ello». En este sentido, Pachi Pascual ha afirmado que «la participación en la consulta promovida por el equipo de Gobierno ha sido muy baja teniendo en cuenta que San Vicente tiene más de 55.000 habitantes y que incluso un grupo de vecinos han recogido, sin el apoyo del Ayuntamiento, un millar de firmas de sanvicenteros que piden que la fuente no se elimine, una cifra muy superior a la de participantes en la encuesta que promovió el tripartito y que además de estar claramente orientada hacia el resultado que iban buscando, en ella podía votar cualquier persona, fuera o no vecino de San Vicente».
El Partido Popular también apoya la iniciativa vecinal de recogida de firmas frente al proceso participativo puesto en marcha por el Ayuntamiento. Al margen de ello, consideran que “ninguno de estos procesos es vinculante, la única decisión válida es la que decida el equipo de gobierno, y esa aún la desconocemos. Esperamos que el Alcalde, Jesús Villar, y el pseudo-alcalde, Alberto Beviá, digan de una vez qué quieren hacer con la fuente, sin excudarse en este tipo de procesos participativos, cuando tienen un listado de más de 200 proyectos en los remanente y ninguno se ha sometido a la participación ciudadana”
El Partido Popular ha sido muy claro en su postura; “la fuente no debe tocarse, salvo para su puesta en funcionamiento y en valor, aprovechando la actuación futura para el proyecto del solar de la yesera, que es cuando se podrá ver en su conjunto las mejores alternativas a llevar a cabo en la zona. Pero a día de hoy la fuente no hay que tocarla, porque el problema de San Vicente no es la fuente”.
Por su parte, en Vox piensan que “el proceso de participación ciudadana ha sido un fracaso ante los resultados obtenidos, un 0,44% del total de la población. Igualmente se necesita una reordenación del tráfico ya que, al parecer, está previsto el desarrollo de un proyecto de un centro cultural en el solar de la Yesera, con lo que ello conllevaría”.
