En la tarde del domingo 11 de septiembre tuvo lugar en San Vicente una brutal agresión.

La misma Edurne Gallego, víctima de este incalificable ataque, relata los hechos a través de un post de Instagram: “Para la gente que no me conozca, me llamo Edurne Gallego Muñoz, tengo 15 años y esta misma tarde, sobre las 19h me han agredido en la urbanización de una amiga mía, en San Vicente del Raspeig. Eran como unos 10 niños (la mitad serán del 2009 y otros de mi edad incluso más mayores ). Estaba yo tranquilamente con mis amigas y vinieron a insultarme 10 niños con insultos homófobos como: “MARICONA” “TRANSEXUAL” “TRANSFORMER”…Yo en esos momentos estaba afectada ya que esos comentarios llevo recibiéndolos en casi toda mi etapa de la ESO pero en ningún momento entré al trapo pensado en que si no les hacía caso me dejarían en paz, pero eso no fue así. Uno de esos 10 niños saltó la valla de la urbanización (cosa que es ilegal y más cuando la urbanización es privada) abriéndoles así a todos sus amigos y dejándoles pasar y empezando otra vez a insultarme y faltarme al respeto cuando en ningún momento les había hecho ni dicho nada. La cosa empezó a empeorar cuando uno quería robarle el patinete eléctrico a mi novia, cosa que no íbamos a dejar hacer, y mi novia lo apartó porque veíamos que se lo llevaba. Al cabo de un minuto se le acerca mucho a mi novia y ella le aparta con el pie por si acaso, hasta que por la cara me pega un guantazo y yo salto de la rabia al saber que me habían pegado y era violencia sexual (ya que soy una mujer y no me puede poner un dedo encima). El caso es que yo al saltar de la rabia del banco me he metido a empujarlo cuando me empiezan a pegar entre 5 niños, con puñetazos en la boca y en la cara, dejándome en estas condiciones, pero no acaba aquí, porque después de que me empujasen entre 5 niños o 6 me voy para atrás de los golpes que me estaban dando y me viene un chico que creo que era morito y me pega un puñetazo en la nariz, rompiéndome un vaso sanguíneo y dejándome la nariz destrozada y sangrando. Ojalá os pueda encontrar porque estas cosas no está bien hacerlas y más por algo homófobo, machista, violencia de género, y violencia en grupo. Esta agresión ha sido básicamente por mi forma de vestir (masculina) mi pelo corto”.

Así relataba los hechos la agredida, acompañando su versión con imágenes realmente impactantes de como quedó su rostro tras la agresión. Un acto violento, incomprensible e inexcusable, que no podemos creer suceda en nuestro municipio en pleno siglo XXI. Todo nuestro ánimo para Edurne y nuestra máxima condena a este tipo de agresiones espeluznantes. Desde Somos Raspeig felicitamos a Edurne por su valentía de plantar cara a los intimidadores, así como por contar públicamente lo sucedido sin miedo a exponerse. Le deseamos que pueda seguir disfrutando con normalidad de su vida, su pareja, su libertad y su pasión por el fútbol sala que tantas alegrías ha dado al deporte sanvicentero.