Rescates en el mar, atenciones médicas por picaduras de medusas y peces, heridas por diversas causas, quemaduras, reacciones alérgicas, mareos, bajadas de tensión, afecciones cardiacas, traumatismos, episodios de asfixia y lipotimias y ayudas diversas, conforman el grueso de las actuaciones que a diario atiende el personal del servicio de salvamento y socorrismo de las playas de El Campello.

En el recientemente acabado mes de julio, las intervenciones directas suman 414, de las que destacan, por su gravedad, los 68 rescates de bañistas en el mar, en la inmensa mayoría de los casos por imprudencias cometidas por los usuarios que se adentran en el mar apenas sin saber nadar o hacen caso omiso al color de las banderas que aconsejan mucha precaución en el baño (amarilla) o directamente prohibición (roja).

Lo peor del mes han sido los tres fallecimientos registrados, dos de ellos de personas de avanzada edad a las que les sobrevino un infarto mientras se refrescaban en el agua, y uno por imprudencia por alejare de la costa y no tener fuerzas para poder volver a la orilla. A lo largo del mes, la bandera amarilla ha ondeado hasta en 60 ocasiones en diversos tramos de los arenales.

Los profesionales destacan el tiempo que invierten en hacer sonar sus silbatos para alertar a la gente del mal estado de la mar, al objeto de que se mantengan en la orilla, donde hagan pie, sin alejarse mar adentro.

El Mediterráneo tiene muchas mareas, y en ocasiones, según sople el viento, aunque el mar parezca tranquilo es aconsejable no ir alejarse de la orilla. “Las corrientes internas son traicioneras y provocan situaciones de peligro que se pueden evitar haciendo caso a los socorristas y a las banderas”, insiste el concejal de Playas, Rafa Galvañ.