José R. Carbonell Beviá. Mestre d’Escola (SAN VICENTE, SU MÚSICA Y SUS MÚSICOS EN MI RECUERDO)
A la agrupación se le denominó “Rondalla Sanvicentina”, ya que tuna no podía ser pues no surgía del seno de facultad universitaria alguna. Pero a pesar de ello, nosotros la llamábamos cariñosamente “La Tuna de San Vicente”. Para su presentación y estreno se monta un espectáculo de cuyo montaje se encarga Pepita Moltó Peral, en el que intervienen, además de la Tuna, algunas actuaciones individuales, todas de jóvenes sanvicenteros/as como fue la mía con el acompañamiento a guitarra de uno de los componentes (Ramón García) cantando “Adelita”, una canción de Nat King Cole. Se presenta la Bandera a la que se le obsequia con varias cintas de los mismos tunos y de otras personas como la que regaló Pepita Moltó Peral. Llevábamos un pantalón blanco y una camisa verde.
Al poco tiempo y con el dinero de que se dispone, se decide completar el traje con una capa negra con una cenefa interior verde y unos pantalones negros al uso de los tunos. Y con el traje oficial y definitivo bajamos con un mini autobús a Alicante a hacer una serenata. Terminada ésta, se nos ocurre hacer un pasacalle por la emblemática Explanada Alicantina y con tan casual fortuna que al pasar por delante del Club Catalá, el presidente (Sr. Farrell, dueño de una afamada ferretería alicantina) nos requiere para que entremos a la sede y actuemos. Obtenemos un gran éxito. Nos proponen volver la semana siguiente y como en el local hay un piano acudimos pero además con la compañía del maestro al piano, Juan Rodríguez Torregrosa que nos acompaña individualmente a Juan Pastor Huesca y a quien esto escribe.
El colegio de los HH. Maristas de Alicante, convoca un Certamen de Tunas al que decidimos presentarnos. Dicho certamen se celebró en el patio del colegio el 23 de abril de 1963 y obtuvimos un segundo premio. Recuerdo que nosotros interpretamos el hermosísimo pasodoble del maestro Padilla, “Valencia” cuyo solista era yo mismo. He de decir que el primer premio fue para la entonces “Tuna del CEU”, que era la única universidad con la que contaba Alicante. Más tarde he podido comprobar que la mayoría de los componentes de dicha tuna habían sido exalumnos del colegio marista.
Los componentes de la Rondalla Sanvicentina éramos: Juan Gracia Albert; Manuel Torregrosa Antón; Antonio Bergara; Miguel López Marín; Andrés Torregrosa Ferrándiz; Francisco Martínez Picazo; Manuel Barberá Sogorb; Antonio Fernández Mira; Juan José García Sirvent; Antonio Pastor Torregrosa; Andrés Martínez Cantó; Ramón García; Juan Llopis Beviá; Víctor Acevedo; Julián García Sirvent; Tomás Albadalejo; Mario Bergara y quien esto escribe. Todos bajo la dirección musical de Juan Pastor Huesca. Soy consciente de que no están todos los componentes, pero he de confesar que me ha sido del todo imposible confeccionar la relación completa. Pido disculpas por ello. Actuamos en el Instituto “Jorge Juan” de Alicante y obtuvimos un clamoroso éxito, pero donde nos encantaba actuar era bajo las ventanas y balcones de las jóvenes sanvicenteras que, complacidas por “la serenata” y agradecidas por ello, como muchas de ellas eran bordadoras, llenaban las capas de sus tunos preferidos con cintas de colores exquisitamente bordadas por ellas mismas con frases muy afectuosas.
La Tuna duró muy poco tiempo porque varios de los componentes estaban pendientes del servicio militar y además el hecho de que algunos se hicieron novia fue el motivo por el que progresivamente el grupo fue menguando en cuanto a número y al final se disolvió. Fue un recorrido corto pero muy hermoso, o por lo menos a mí me lo pareció.
