Desde Esquerra Unida Raspeig queremos expresar públicamente nuestro más profundo agradecimiento a El Baresito, un lugar que, desde su apertura en 2012, se convirtió en mucho más que un local: fue un refugio, un punto de encuentro y un verdadero hogar emocional para generaciones de sanvicenteros y sanvicenteras.

Durante más de una década, El Baresito ha sido un espacio en el que la ciudadanía de todas las edades ha compartido risas, debates, ilusiones y proyectos. Especialmente para una generación de jóvenes, este rincón único del municipio ha sido testigo de historias de amor, de amistades que perdurarán toda la vida y de sueños que comenzaron a tomar forma entre sus paredes.

Su identidad alternativa y diversa lo convirtió en un símbolo de la cultura viva de nuestro pueblo. Ha albergado conciertos, monólogos, charlas feministas, encuentros sociales y multitud de actividades que han dado voz a propuestas culturales y sociales que no tenían otro espacio donde crecer. El Baresito ofreció, desde el primer día, una alternativa diferente y necesaria al ocio convencional de San Vicente, respirando libertad, creatividad y pensamiento crítico.

Ayer celebramos allí nuestro Consejo Político, una decisión que para nosotros tenía un profundo valor simbólico. Queríamos cerrar este ciclo agradeciendo de manera especial todas las veces que nos abrió sus puertas para celebrar encuentros, actos y eventos de nuestra organización. Para Esquerra Unida Raspeig, El Baresito ha sido siempre un aliado, un espacio que nos ha acogido con cariño y cercanía.

Hoy nos despedimos con emoción, pero también con gratitud. Porque, aunque cierre sus puertas, El Baresito o más bien, Marcosito, ya forma parte de la historia viva de nuestro municipio. Siempre será recordado como ese soplo de aire fresco que transformó el ocio en San Vicente del Raspeig y como un lugar que dejó huella en todas las personas que lo hicieron posible.

Gracias por tanto, Marcos. Tu esencia seguirá latiendo en la memoria colectiva de nuestro pueblo.