Texto de José Ramón Carbonell Beviá. (Mestre d’Escola) en su sección SAN VICENTE, SU MÚSICA Y SUS MÚSICOS EN MI RECUERDO
Vicente Lillo Cánovas nace en San Vicente el 2 de septiembre de 1915. Cursa sus estudios primarios en nuestra localidad y posteriormente el bachiller en el Jorge Juan, único instituto de enseñanzas medias, por aquel entonces, de nuestra capital. Simultáneamente a los 9 años ya comienza a actuar en nuestra banda local.
En 1933, termina los estudios de Magisterio. Con tan sólo 17 años se le otorga el título de Maestro de Primera Enseñanza. Dos años más tarde es requerido por Luis Torregrosa (director de la Banda Municipal de Alicante) y superadas las pruebas necesarias ingresa interinamente como fliscorno solista y posteriormente, ocupa dicha plaza en propiedad al aprobar la oposición pertinente. En 1936 consiguió por oposición una plaza en los Cursillos de Magisterio Español. En 1940, el entonces director de la B. M. de Madrid, le ofreció una interinidad en dicha agrupación que tan solo ocupó durante tres meses ya que, pasado este tiempo, ingresó por oposición con el nº 1. Oposita y obtiene la plaza, en propiedad, como Brigada Músico de Primera (con el fliscorno) en la Banda de Aviación fundada el 10 de junio de 1940. Del año 1936 al 1939 es reclutado por el ejército español, dentro de los reemplazos de llamamiento a filas. Durante el curso académico 1940-41, cursa oficialmente los estudios correspondientes a la especialidad de Trompeta-Fiscorno en el Real Conservatorio de Madrid, obteniendo una calificación global de Sobresaliente y consiguiendo los Diplomas de Primeros Premios en Música de Cámara y Trompeta-Fiscorno. He de aclarar que, hasta ese momento, fue el único músico que realizó los estudios correspondientes a los dos instrumentos simultáneamente en el mismo curso. En 1941 entra a formar parte de la plantilla de músicos de la Orquesta Filarmónica de Madrid, dirigida por Bartolomé Pérez Casas y en 1942 pasa a ocupar la plaza de Solista en dicha formación.
Por aquel entonces, los padres de la joven sanvicentera Herminia Jover Llopis, pretenden buscarle un profesor para que le ayude en los estudios de Bachiller y les informan de que en el pueblo hay un muchacho que es Maestro de Primaria y que, además, tiene muy buena reputación como músico. Hablan con él y comienza a darle clase. Con el tiempo el profesor se convirtió en su novio y el 14 de abril de 1942, contraen matrimonio y lógicamente, se trasladan a Madrid.
En 1944, la ONE (Orquesta Nacional de España), solicita sus servicios como trompeta solista contratado como interino, pues no existía vacante en ese momento. El 1 de marzo de 1945 se licenció voluntariamente del servicio en Aviación y opositó a la Banda Municipal de Madrid, donde ingresó como fliscorno y ocupó la plaza hasta años más tarde en que solicitó la excedencia voluntaria. En ese tiempo se fundó la Orquesta de Cámara de Madrid, dirigida por el Maestro de Castro Urdiales (Cantabria), Ataulfo Argenta y nuestro paisano es nombrado Primer Trompeta de dicha formación. En 1947 oposita a la ONE, pero en esta ocasión para la obtención de plaza como Profesor Titular, continuando de este modo su destacado puesto de Solista, que ya poseía, sin interrupción desde 1944. En 1968 es nombrado, por oposición Profesor de Música en la especialidad de trompeta e instrumentos de viento de la ONCE, en Madrid.
Como solista de la ONE, viajó por toda Europa con los maestros Argenta, Pérez Casas y Frühbeck de Burgos. Realizó con el fliscorno varias grabaciones con la B. M. de Madrid bajo la dirección del Maestro Jesús Arámbarri. Con la Casa de discos Montilla y a través de la Casa Zafiro consiguió dos premios nacionales por las grabaciones de dos álbumes “Jota de España” y “Pasodobles Españoles”. Así mismo, realizó varias grabaciones para la música de la cinematografía y participó en numerosas temporadas de Zarzuela, Ballet y Ópera. Es poseedor de la Corbata de Alfonso X, el Sabio por su colaboración con la ONE; la Medalla de Oro al Mérito en las Bellas Artes y el nombramiento de Caballero de la Orden del Mérito Civil, otorgado por S. M. Juan Carlos I. El 25 de noviembre de 1978 fue nombrado “Sanvicentero Ilustre”, por la Corporación Municipal del Ayuntamiento de San Vicente.
Falleció el 18 de enero 1985. Ha sido el músico más importante, el de más alto nivel que ha tenido nuestro querido San Vicente del Raspeig y cuyo Conservatorio Municipal recibe el nombre de Conservatorio Profesional de Música “Vicente Lillo Cánovas”, en su honor.
Desde el año 1987 hasta la fecha, se celebran en su honor una serie de eventos musicales que bajo el título de “Semana Musical Vicente Lillo Cánovas”, ha contado con actuaciones estelares nacionales e internacionales.
De todo lo relatado hasta aquí es fácil deducir que poseía una aptitudes excepcionales para los instrumentos de viento – metal, prueba de ello es su brillante carrera con varios de ellos. Según me informó mi padre, comenzó a tocar el bombardino. De igual modo le ocurrió con la trompa, pero pronto los dejó. No por dificultad, simplemente porque le atraían más los de boquilla más estrecha. A pesar de que dominaba perfectamente tanto la trompeta como el fliscorno, fue muy inteligente al priorizar la primera, pues le permitía un abanico mucho más amplio de agrupaciones en donde desarrollar sus excepcionales aptitudes.
Para terminar deseo relatar una anécdota que me ocurrió con mi relación con este insigne sanvicentero. En cierta ocasión, quien esto escribe, tenía que cantar una romanza de zarzuela ante un jurado en un concurso lírico. Mi padre me llevó ante D. Vicente. Cogió la partitura y “a capella” me dijo: “Comienza a cantar”. No había llegado a unos diez compases cuando me hizo detenerme. Cerró la partitura y me dijo: “Pero ¿tú sabes lo que estás diciendo? ¿Entiendes el significado de la letra? Venga, cuéntame la historia”. Se la conté y entonces me dijo: “Para cantar una melodía con letra, primero debes saber qué quiere decir, su contenido, su mensaje y luego hacerlo expresando lo que el autor ha querido exponer. Personalmente, cuando tengo que tocar una melodía con la trompeta que lleva letra lo primero que hago es leerla muy detenidamente percatándome de lo que el autor quiere decir y una vez está esto claro, comienzo con la Música”. Para mí, por aquel entonces, fue toda una lección magistral. Además de un gran intérprete, fue un buen Maestro y sobre todo, una EXCELENTE persona.
