Compromís pel Campello

Que vivimos momentos convulsos en la política municipal es más que evidente. La legislatura anterior (2015-2019), que no estuvo exenta de problemas, terminó con una composición de cuatro de los cinco partidos que iniciaron la andadura de gobierno del cambio, un equipo de gobierno que, pese a las limitaciones, nunca dejó de actuar, ni hizo dejación de sus funciones incluso en una etapa en las que tan solo lo conformaban seis concejales de los veintiuno del pleno.

Fue una travesía en el desierto muy difícil, pero al mismo tiempo ilusionante porque significaba un reto importante. Tras años de gobiernos del PP, era una coalición de partidos la que tendría la oportunidad de llevar las políticas progresistas en El Campello pese a la deslealtad de uno de los socios (EU) que, tras firmar el acuerdo de gobierno donde en una de sus cláusulas especificaba que “los partidos se comprometían a respetar  las decisiones mayoritarias consensuadas y, por tanto, habiendo cinco fuerzas políticas SOLO había un único  gobierno”, no respetó esta premisa y a los tres meses escasos hubo que prescindir de su participación, comenzando así una oposición destructiva por su parte sin propuestas alternativas y anclados en el no por el no. Sorprendentemente, jaleados por un partido de derechas como Cs, tal y como consta en las actas de los plenos en los que sistemáticamente coincidían a la hora de votar con la consiguiente algarabía, cosa que no han hecho en esta legislatura, a pesar de la nula o mala gestión que han demostrado a lo largo de su mandato.

Llegaron las elecciones de 2019 y Cs se presentaba como el “elefante blanco” que iba a dar solución a todos los problemas, el resultado fue la pérdida de votos para el tándem Cs y EU -estos últimos un concejal menos y los “calabaza” unos votos menos-.

La legislatura actual con la mayoría absoluta de PP-Cs-Vox ha resultado un caos nunca conocido en El Campello. A simple vista, tenemos: las playas en peor estado que nunca; los servicios públicos del Ayuntamiento en su mayoría paralizados; dudamos de la existencia de los servicios sociales, todas ellas responsabilidades hasta hace poco de los concejales de Cs. ¿Alguien ha visto en estos tres años protestas de vecinos manifestándose por la mala gestión o existen actas de los plenos en esta legislatura en las que el concejal de EU proteste por la política nefasta y antisocial de Cs? No es de extrañar viendo la actitud y trayectoria de un partido que se autodenomina de izquierdas, y que no ha sido capaz de calibrar la medida de sus actuaciones. Por ello, en estos momentos no hay funcionario que se atreva a firmar nada sin unas garantías legales. Ha sido capaz de realizar una denuncia ante los tribunales, que tiene como consecuencia directa la parálisis de la actividad del Ayuntamiento, ya que hay que recordar que el departamento de mayor impacto de servicios para el ciudadano es Infraestructuras y Servicios Públicos (obras, mantenimiento, saneamiento, limpieza, recogida de residuos, infraestructuras y mantenimiento de playas, jardines, etc.). Además con la correspondiente denuncia a la Jefa del Departamento de Infraestructuras -queremos pensar que sin medir las consecuencias-, porque no cabe en cabeza humana que, desde un partido que se autodenomina casi en exclusividad “defensor” de los trabajadores, ponga en peligro el puesto de trabajo de una funcionaria. Mayor insensatez, imposible.

Al alcalde (PP) parece que, por los escritos que circulan, y por los rumores que recorren el Ayuntamiento, no se le ha ocurrido otra cosa que cesar o remover a la funcionaria en cuestión como Jefa del Departamento de Infraestructuras y Servicios, por negarse a firmar cualquier contrato que no tenga las garantías legales. Actitud lógica después de lo que se le ha venido encima, y después de solicitar una y mil veces la petición de cobertura legal y recursos a los distintos departamentos administrativos, sin recibir respuesta.

Sr. Alcalde, no sabemos si ha meditado suficiente y bien esta posible decisión. A pesar de las diferencias ideológicas que nos separan a su partido y al nuestro, en principio no tenemos por qué dudar de la voluntad de cada uno de nosotros de trabajar y proponer lo que consideramos mejor para nuestro pueblo mejorando las condiciones de vida de los vecinos y visitantes de El Campello, independientemente de que las prioridades o conceptos sean lógicamente diferentes. Igualmente ocurre en nuestros planteamientos, a priori no estamos cerrados, son posturas que hay que escuchar y valorar, si hay acuerdo o no, muchas veces depende del talante. No estamos en política para hacer ruido, salir en los medios, medrar a costa de los errores de los demás y, por tanto, no proponemos imposibles. Siempre hemos tenido claro que la mejor política es la del diálogo para llegar al acuerdo, si es posible, y nunca la de la máxima “de cuanto peor mejor”.

Señor alcalde, desde la cordialidad y el respeto, le invitamos a sacar las manos de ese fango y valore la trayectoria de una persona que usted conoce al igual que nosotros, y que sabe de su honradez y honestidad, de su lealtad a la Institución, de su profesionalidad, de su entrega a su puesto de trabajo, y prueba de todo ello es además su capacidad para hacer equipo. Si han tenido la oportunidad de comprobarlo a lo largo del tiempo los concejales que han pasado por su Departamento, tanto de un partido como de otro, no le digo ya cualquier trabajador a su cargo, conocedores de la calidad humana de su Jefa de Servicio, quien necesita ahora de suficientes medios personales y legales para realizar su trabajo y la solidaridad colectiva para afrontar con fuerza y dignidad las tropelías de gente a la que lo único que le preocupa es su ego y su particular batalla contra el mundo.

Con este panorama hay quien se plantea una moción de censura, nos vienen a la mente unas cuantas preguntas, vista la composición del Ayuntamiento y la trayectoria de esta legislatura: una moción de censura ¿con quién? ¿Contra quién? ¿Con qué finalidad? Solo pedimos que no se juegue a confundir a la gente, en ese juego perderemos todos.

Compromís a lo largo de la Legislatura 2015-2019 tuvo que confeccionar la cesta con los mimbres de que disponía. Le aseguramos que no fue fácil, pero con voluntad, ganas, esfuerzo y, sorteando todo tipo de obstáculos, llegamos al final.

El Campello se merece respuestas y soluciones urgentes a los numerosos problemas que tiene el Ayuntamiento y sufre el pueblo del Campello, en esta faena nos encontrarán.