Su vinculación al mar es innegable. De hecho, no concibe la vida sin él y sin  la devoción familiar a la Virgen del Carmen, de la que adoptó el nombre por deseo expreso de sus padres. Carmen Terol Carratalá, campellera por los cuatro costados y festera hasta la médula, ha aceptado el encargo que le ha hecho el alcalde, Juanjo Berenguer, de pregonar las fiestas marineras de este año.

“Será mi primer acto de estas características… y estoy tan agradecida como nerviosa”, reconoce, al tiempo que recuerda estar vinculada a estas fiestas “de toda la vida”. De hecho, participó en 1975 en la primera procesión marinera que se organizó, y desde entonces no ha faltado ni un solo año a esa cita.

“Vivía en Carrer la Mar, y también era obligatorio participar en el Carnaval y las carrozas”, señala.

Carmen Terol lleva toda la vida vinculada al mar, y eso le viene de familia. Tanto por parte de madre como de padre, su árbol genealógico está plagado de armadores y pescadores, y ella misma ha sido armadora, con la mítica embarcación “Chirla” en su haber.

Casada con un  marinero, su descendencia también está vinculada al mar. Tan lejos llegan esos lazos, que recuerda con orgullo que su bisabuelo fue el primer presidente que tuvo el Posit Pescador de El Campello, allá por 1919.

En definitiva, que el discurso que leerá el próximo 12 de julio estará cargado de recuerdos y de conocimiento de causa. “Lo redactaré con el corazón, que es lo que toca”, sentencia.

Tanto el alcalde Juanjo Berenguer como el concejal de Fiestas y Tradiciones, Cristian Palomares, coinciden en señalar que la elección es “acertada”. “Seguro que el suyo será un pregón emotivo”, aseguran.