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CULTURA El Campello

«Pinceladas de ayer y de hoy» por Remedios Delosángeles

OPINIÓN Remedios Delosángeles Climent

Fotografía – pintura del muro de Turismo – Reflexión de mi autoría escrita en clave Gloria Fuertes

Pinceladas de ayer y de hoy.

Fue el más bello lienzo que artista pudo pintar, sobre un lugar paradisíaco que ignoraba su ciudad.

Éramos Pedania pedregosa y olvidada. Desde el cauce del río seco hasta el Carritxal.
Fabraquer, palacetes y haciendas …Eso era otro cantar.

Sin embargo, el ya pueblo del Campello con vara y ayuntamiento ignoro al noble condado, apellidos provenzales y viñedos por todos lados en buenos lagares refinados.

El pueblo se fue formando desde la hacienda del Marqués y fue bajando y bajando.

Los arrieros formaron plaza para vender sus patatas del riuet de Xixona y buen tomate de Mutxamel.

Don José Climent, mi rereretatarabuelo – con mucho orgullo lo cuento – decidió levantar iglesia para llevarse bien con la «beata» de su parienta…Ahí está Santa Teresa. ! Y la plaza ! – Dijo al pueblo, Climent !

¡La plaza se paga «redeu», que pa rezar un rosario mi parienta y unas cuantas ya tienen parroquia abierta y una campana avisando maitines y demás rosarios, y también confesionario!

300 reales de véllon se echo a la buxaca el rereretatarabuelo de este dedo que, roza el abecedario para escribirles a ustedes a grandes rasgos, por supuesto, la historia de este pueblo pescador hoy pueblo más que pescado.

Las cuevas «de los corsarios» abrigaron otras gentes, que buscaban un refugio donde resguardar sus barcos.

Poco a poco el pueblo pescador se fue armando. Por lo tanto este extremo de tierra, olvidada por la ciudad dos pueblos iba formando: la parte de arriba y la de abajo.

Los vecinos de arriba y de abajo confundieron las vías del Trenet, que descaradamente serpenteaban dejando a un lado cementerio parroquial y Convent … Pensaron que era una frontera «i pedrá va i pedrá ve » , los apellidos no se mezclaron.

Y así la Pedania en pueblo se iba formando con «carramaleros de baix i campelleros de dalt»… Era como volver a empezar con Fenicios, Iberos y alguna raza que otra más.

Pero hay que reconocer que en paz y gloria se vivía y, si para comer no había más que raspas de pescado, porque la molla se vendia … Algún melón o sandía de tierra de arriba a base de trueque caía.

Y así el pueblo funcionaba sin siquiera funcionarios, porque los hombres del pueblo designaban a dedo al mayor contribuyente para gobernarlo.

Que no es que, solo fuera de ese modo para que al ser pudiente no cobrara ningún sueldo… No. Un poco de intención había en que de su propia «buxaca» pagar …algo pagaría para remendar algún remiendo si las arcas estaban vacías.

Como han cambiado las cosas en este pueblo querido … Seguimos teniendo Convento, aunque apuntalado con tres cerchas y una vecindad que pasa…. de esa y muchas otras reliquias… Para ser sinceros pasar pasamos de todo….bueno menos de las fiestas, que ahí está la unión del pueblo.

¿ Que son unas piedras viejas?

Y seguir… seguir bailando con pasodoble o fandango, pero quedaría mal con muchos porque hoy Campello también baila bachata y habría que incorporarlo.

Somos un pueblo pescado.Ya lo dijo el tío Galvañ Colomina, en mi libro reflejado.

Y yo digo, que … «¡Campello tiene un color especial, tiene un color diferente, sabe a romero y a sal, pero ay! pero ay ay ay!
No hay armonía entre su gente!

( Fotografía – pintura del muro de Turismo – Reflexión de mi autoría escrita en clave Gloria Fuertes ).

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