Pascual Andrés Tévar

En este mes de junio de 2023 rondando la hermosa noche de San Juan, donde el día se hace
interminable y luminoso, y con el calor intenso a cuestas, siento la necesidad de reflexionar
sobre las fronteras de las fantasías, que tenemos tan olvidadas, y que son imprescindible, para
darle sabor, color, sentido, diversión, y retos a nuestra forma de vivir.
Es fantasía, sentir a la compañera de la vida, no acepto mi mujer, y mucho menos la oficial de
cónyuge, como si la tuvieras que descubrir cada día. Que no hay rutinas, que no hay tareas
impuestas, que todo es necesario inventarlo o mejor reinsertarlo cada amanecer. En
consecuencia, es imprescindible que llevados por la fantasía, dejemos paso a saltarnos las
rutinas. Por ejemplo, un día doy el beso de pasión, en la cama, otro día en la cocina, otro día en
la terraza, otro día en la escalera, otro día en la calle, en cualquier lugar y momento,
improvisado, y así variando hasta el infinito
Es fantasía, sentirte un padre, y tener la oportunidad, de concederte el deseo de mirar por un
agujero secreto a tus hijos , e influenciarles en tomar las decisiones con alegría, en ayudarles a
ser felices consigo mismos, y de alguna forma estar a su lado, como un compañero de viaje, que
sabe darle el consejo, y el empuje de ilusión , en los momentos de dudas y complicados, que de
alguna forma mágica , les hace más fuertes, para no perder la ilusión y seguir adelante.
Es fantasía, sentirte amigo del alma, del compañero de la aventura de la empresa, y saber
expresarlo y transmitirlo sin palabras, pero que van poniendo día a día los cimientos, de los
valores de trabajo, humildad, sacrificio y superación, que dan esencia y valor, a todo lo que
vamos compartiendo juntos desde hace más de 45 años. Y no perder nunca la fe, para seguir
adelante, y para descubrir nuevas formas, más allá de la empresa.
Es fantasía, sentirte sentir más cerca , a los amigos, donde la vida azarosa , no te deja apenas
verlos y menos compartir momentos, y darle la vuelta a todo eso, y poner inventarte la forma
de verlos y charlar, y reír, y tomar una copa juntos, y cantar juntos , a nuestra manera , las otras
formas de ver la vida, con optimismo, y como una desafiante y apasionada manera de darle
sentido a los pequeños momentos, que nos pasan desapercibidos, y vamos , sin darnos cuenta,
de dejarnos a un lado, y que bastaría con vivirlos a tope , para que sean siempre motivos de
alegría y de calma.
Es fantasía, ir a nuestra querida Peña Madridista, y percatarnos que aunque el reclamo , es ver
y vivir con nuestro Equipo del alma, saber y ser conscientes, que a través de esos ratitos que
pasamos y vivimos juntos, tienen un sabor mágico, para agitar como de verdad se merece, la
coctelera de los valores de la amistad, de la superación, de la humildad, y de las ganas de vivir
como si cada día fuera el último Y no perdernos, como lo hacemos casi siempre, en los oscuros
y siniestros mundos , de las dudas y miserias, de los egoísmos, de los odios, de las violencias en
todas sus formas, de las frustraciones, que sin darnos cuenta, llevamos insertadas en nuestras
formas de pensar y de vivir. Y que bastaría, percibir esa magia, de saber descubrir los
pensamientos y sentimientos pensar y de sentir de verdad, a los demás, antes que a nosotros
mismos.
Es fantasía, sentir, que eres ese tío divertido, bromista y dicharachero que, alguna vez lo fuiste,
pero que se ha perdido en el infinito misteriosos de las dudas. Y recuperar, ese autocontrol, para
saber sacar, a tiempo, esa broma, ese chiste, ese comentario, que levante la moral de la familia,
de los colegas, de los momentos difíciles, y casi sin quererlo, ser el alma del empuje de ánimo,
de la fiesta, de levantar la moral cuando parece que todo está perdido y desubicado. Cuando lo
piensas, de verdad, te sientes un poco Superman, y les valor, a momentos, en los que no eres,
capaz de detenerte a pensar, y sobre todo a sentir de verdad. Y no es, por sentirte el
protagonista de nada, sino todo lo contrario, por hacer sentirse protagonistas a los demás.
Porque es entonces, cuando te sientes satisfecho de ser un buen compañero de viaje en la vida.
Así que, en este peregrinar, del mundo de la fantasía, por un momento, inmerso en estas
solitarias reflexiones, me he sentido mejor amigo, compañero , y amante, de la mujer con la
que comparto la vida, mejor padre, compañero, y amigo al mismo tiempo, mejor compañero
del amigo del alma, y de la empresa, de los amigos y amigas, que me acompañan en la vida, de
los amigos y colegas en la Peña, de los ciudadanos, y ciudadanas que me acompañan en el
mundo cada día. Y ante tanta avalancha de las olas infinitas de fantasías, y de moral, entiendo
que todo tiene sentido inundado por nuestra increíble luz mediterránea.