Desde la parroquia de San Vicente Ferrer de San Vicente del Raspeig nos envían este texto sobre Cáritas Interparroquial de San Vicente, que está dando diariamente de comer a 150 personas:

En medio de esta pandemia del COVID-19, en la que a nadie se nos esconde la realidad de necesidad que a muchos ha sorprendido, y que ha generado faltas de recursos y necesidades básicas entre las familias de nuestro municipio, nos hemos sentido llamados por el Señor e impulsados por el evangelio, a estar más cerca que nunca de aquellos hermanos nuestros que más nos podían necesitar. A parte de la atención que ya se venía realizando en las parroquias y congregaciones religiosas de nuestro pueblo, hemos tenido que intensificar la intervención con nuevos recursos y ayudas para los que más están sufriendo las consecuencias del coronavirus.

Por ello, desde el pasado día 11 de mayo, la Iglesia de San Vicente del Raspeig (Parroquias de San Vicente Ferrer, Inmaculada Concepción y Santa Isabel de Hungría junto a las Hermanas del Cottolengo del Padre Alegre y las HH. Salesianas del Sagrado Corazón de Jesús) estamos llevando a cabo un proyecto de comidas calientes para participantes de Cáritas Interparroquial, con el que estamos atendiendo a 129 personas en las dependencias del Colegio Santa Faz de las HH. Salesianas del Sagrado Corazón de Jesús y 41 personas en las instalaciones de la Parroquia Santa Isabel de aquel barrio más alejado del casco urbano.

Estas comidas que se componen de un menú diario de plato caliente, pan, postre y complementos, viene fabricado por el CDT, Escuela de Hostelería. Alicante (80 menús) y por el Instituto Secular Ignis Ardens (90 menús), y distribuido entre los participantes por voluntarios de Cáritas y del Excmo. Ayto. de San Vicente del Raspeig.

Además de distribuir esta comida entre los participantes que se acercan a nuestras instalaciones con las debidas normas de seguridad e higiene, los mismos voluntarios, se desplazan a los hogares de aquellas personas que por su condición de riesgo o vulnerabilidad no pueden venir a recoger su menú.

Esta labor pertenece a las mismas entrañas de la Iglesia cuyo corazón es la caridad, y cuya invitación del Señor es a darles nosotros de comer como Él lo hace con nosotros, convirtiéndose además en nuestro alimento espiritual.

Queremos aprovechar este espacio para agradecer la colaboración y solidaridad de tantos particulares, empresas, asociacones e instituciones de San Vicente del Raspeig que han colaborado desde el inicio de este estado de alarma, en una tarea que es cosa de todos y que nos ha exigido a las diversas asociaciones con carácter social a coordinar los esfuerzos, siempre a favor de los que merecen que todos tengamos la misma dignidad y los mismos derechos.