Ante las recientes informaciones aparecidas en diversos medios de comunicación, que se alejan y desvirtúan el posicionamiento de Cs El Campello al respecto de la situación de la desaladora de Mutxamel – El Campello , el primer teniente de alcalde y portavoz de Cs , Julio Oca, manifiesta su rechazo a asumir una sangrante subida en el recibo del agua,  a causa de la puesta en marcha de la desaladora y exige una reunión a tres bandas entre Acuamed, Aguas de Alicante y todos los grupos políticos municipales que conforman nuestro Ayuntamiento.

«Se busca expresamente la desinformación para nuestros vecinos acerca del incremento en el recibo del agua a la que tendrán que hacer frente. Se nombra sólo a un partido, el nuestro, y a la oposición cuando, curiosamente, esta problemática a la que hoy nos enfrentamos arranca del año 2006, cuando este Ayuntamiento, junto a otros de la comarca, aceptaron la construcción y puesta en marcha de las desaladoras y decidieron que el coste tenía que sufragarlo los usuarios» explica el edil naranja.

Denuncian que es un convenio, este de 2006, refrendado con los únicos votos a favor de PP y PSPV. Cs ni existía en El Campello. Y es ahora cuando Acuamed y el Ministerio nos imponen cumplir con ese convenio y se preguntan si Ciudadanos es el responsable.

Dicen que tratan de incrementar el recibo del agua poco a poco, en pequeñas dosis, de manera sangrante, porque “esa chapuza de convenio del 2006” nos lleva a un incremento salvaje del recibo, que quisieron “corregir” hace un año con un nuevo convenio, el de 2020, que llevaron a cabo sin tener en cuenta a nadie, en una decisión personal del alcalde, que negoció con Acuamed la nueva tarifa, y que resultó en una subida brutal del recibo del agua en 40 años.

Ahora, argumentan que nos hallamos ante un callejón sin salida, en el que se nos da a elegir entre lo malo o lo peor, es decir, desangrarnos a 25 o a 40 años, 2006 0 2020. Y esto es lo que rechazamos en el Pleno de marzo, nuestra agrupación, junto con los partidos en la oposición; porque PP y VOX, (este último partido públicamente contrario a las desaladoras), votaron a favor de un nuevo convenio que nos aboca a una subida continuada y sangrante del recibo del agua, pero en pequeñas dosis, para que no “nos duela tanto”,

Además critican que Compromís, en los temas relevantes no se moja, se dedican a pedir la dimisión y actuar de palmero de los que en principio deberían estar más alejados de sus políticas pero que, a la vista de los acontecimientos, más parecen su sustento que su oposición.

Insisten que rechazan el nuevo convenio y el anterior, auténticas chapuzas fraguadas para poner en funcionamiento una desaladora que no es necesaria. Con un trasvase que no requiere ser cortado y que incluso se puede incrementar. Denuncian esta situación y denuncian que no se les tenga en cuenta. Quieren evitar que la desaladora sea el nuevo vertedero “Les Canyades” en El Campello, con una subida constante del recibo del agua, con costes directos e indirectos, a lo mejor, durante 40 años, en dosis pequeñas; a lo peor, en 25 en raciones más altas.

Se preguntas que ¿Por qué el agua de la desaladora sólo la tienen que pagar los usuarios? Se preguntamos ¿Por qué el resto de infraestructuras nacionales son sufragadas por toda la ciudadanía? ¿Por qué en Cataluña las desaladoras se sustentan con los impuestos de todos los contribuyentes y no sólo por los usuarios? Estas y otras preguntas quedan sin respuesta. Se les presenta el acuerdo al que llegaron “Aguas de Alicante” y “Acuamed”; se les presenta un cheque en blanco para aprobar en un Pleno, sin ningún tipo de información.

Dicen que se pueden hacer las cosas de forma transparente, con diálogo y consenso y no conducirnos a una ratonera, para forzar la firma de un nuevo convenio, con una subida demoledora e irreparable a 40 años. Como 40 años son los que ningún partido gobernante en el municipio ha intentado obtener la concesión del agua para El Campello, algo surrealista pero bien real y que ahora quieren remediar “a ciegas” como ya ocurrió en 2006…  y de esos barros, estos lodos.

Para el primer teniente de alcalde y portavoz de Cs en El Campello, Julio Oca, boicot es tomar decisiones erróneas unilateralmente y después dar a elegir al ciudadano entre lo malo y lo peor, por lo que demanda una reunión urgente a tres bandas en la que absolutamente todos los partidos, que representan a toda la ciudadanía campellera, puedan acceder a cualquier información que demanden y tomar parte en una decisión que nos hipotecará durante décadas.