Los medios de comunicación locales son esenciales para preservar la pluralidad informativa y proporcionar una información cercana a los ciudadanos, una información que se considera como un bien básico y fundamental en el desarrollo de la sociedad local.

Una ciudad del tamaño y relevancia de San Vicente merece contar con unos medios locales independientes y unos profesionales que, con su labor honrada, imparcial y cercana, nos narren, con proximidad, los acontecimientos de la ciudad, al tiempo que velan por la transparencia de las actuaciones de las instituciones públicas locales.

Tras siete años de actividad continuada, el apagón televisivo de TV de San Vicente es una lamentable noticia que afecta tanto a un acceso más plural de la información como al disfrute de las imágenes, con el tiempo históricas, de los muchos acontecimientos que se viven en este pueblo: culturales, festeros, deportivos, sociales o políticos. Tristemente, el 25 de mayo fue el último día de emisión. Desde el Cónclave abogamos a favor de que la televisión local vuelva a emitir de nuevo y esperamos que reciban el apoyo –quizá mediante inserción de publicidad– privado e institucional, para que puedan seguir con tan útil cometido.

Por otro lado, el proyecto del periódico Somos Raspeig no parece tener asegurada su estabilidad y es posible, dadas las circunstancias, que se malogre en un tiempo no muy lejano. Por eso, desde el Cónclave nos solidarizamos con el equipo de Somos Raspeig para que no decaigan en su empeño de que San Vicente tenga un medio de prensa digno de nuestra ciudad. Y deseamos que pueda cumplirse su ilusión de sacar a la calle una edición en papel gratuita cada viernes.

Como entidad cultural, el Cónclave S. Vincentius Ferrer Raspeii ofrece su colaboración y apoyo desinteresado al periódico Somos Raspeig, con el fin de que no desaparezca un bien imprescindible y valioso para nuestro pueblo. ¡Ánimo!